Desde hace varios años, representantes del mercado de capitales venezolanos han elevado esta propuesta al Ejecutivo, ya que consideran que con ello bajarían las presiones cambiarias y las cuales han llevado el dólar paralelo a un valor que supera en 450 veces el oficial de 10 bolívares por dólar en el sistema de divisas protegido Dipro.
Para Juan Domingo Cordero, presidente de Rendivalores Sociedad de Corretaje, en la Bolsa se puede permitir la negociación de un monto en divisas específico, cuyo tipo de cambio lo determinen los propios participantes. Esto generará confianza y aliviaría las presiones cambiarias producto de la poca oferta. Sostiene que es necesario un dólar flotante cuyo precio refleje la oferta y la demanda privada.
«Las operaciones de este mercado de libre flotación serían supervisadas por el Banco Central de Venezuela, cuyos montos oscilarían entre un mínimo y un máximo previamente establecido por un tiempo específico de quizá media hora. En las ocasiones en las que hemos podido reunirnos con representantes del gobierno, le hemos reiterado esta propuesta», dijo.
Venezuela mantiene un control de cambio desde el año 2003 y ha instaurado distintos esquemas de asignación de divisas, sin embargo, en los últimos años el gobierno ha restringido la entrega de dólares tras una caída de los ingresos petroleros y ante los importantes pagos de deuda externa que han tenido que ejecutar la República y Pdvsa.
Al respecto, el Ejecutivo ha exigido a los empresarios con capitales en divisas fuera del país, repatriarlos o utilizarlos para ejecutar su compra de materia prima o la importación de bienes terminados.
Cordero señaló que inversionistas, empresarios y hasta personas naturales que requieran obtener divisas para viaje al exterior, pueden acceder a ese mercado alternativo que se genere en la BVC; al tiempo que daría confianza para que los capitales retornen al país.
«Sería un mercado en el cual podrían participar también entes públicos», dijo.
– Sin desarrollo –
Sobre el mercado de valores venezolano, el presidente de Rendivalores resaltó que la Bolsa de Valores de Caracas aún no cuenta con un desarrollo sostenido, lo cual la coloca como uno de los mercados de menor tamaño en la región latinoamericana.
La BVC presentó una dinámica importante antes de las estatizaciones de empresas locales como Cantv y la Electricidad de Caracas, las cuales cotizaban sus acciones en bolsa.
Las casas de bolsa también quedaron fuera del mercado de renta fija, especialmente de las negociaciones de bonos de deuda en divisas, luego que el gobierno considerara que representantes del sector cometieron irregularidades con estas operaciones.
Ambas situaciones generaron que muchas casas de bolsa y sociedades de corretaje cerraran sus puertas.
Cordero señaló que «lamentablemente el mercado de capitales en el país no ha podido crecer de manera satisfactoria».]]>