Petróleos de Venezuela (Pdvsa) solicitó el 21 de julio al fiduciario Mitsubishi UFJ Financial Group Inc. una prórroga hasta el 11 de agosto, momento en el cual espera poner a disposición los documentos, según una carta fechada el 31 de julio y enviada por el banco a los tenedores de bonos 2020.
Pdvsa estaba obligada bajo el contrato a proporcionar informes financieros auditados de 2016 a finales de junio de este año, y al no producirlos los tenedores de bonos podrían declarar la compañía en default, según Bloomberg.
Un representante de Pdvsa declinó hacer comentarios al portal de noticias e información financiera.
El gobierno venezolano y Pdvsa están siendo objeto de un intenso escrutinio por parte de los inversionistas, ya que las sanciones estadounidenses contra funcionarios clave del Ejecutivo nacional y imposición de la Asamblea Nacional Constituyente del presidente Nicolás Maduro amenazan con interrumpir los flujos financieros.
Con el fin de proporcionar la prórroga, el fideicomisario necesitaría contar con al menos 50% del capital principal de los bonos. Si no se da la autorización, los tenedores de 25% de la deuda pueden emitir un aviso de default, lo que desencadenaría un evento de incumplimiento 60 días más tarde si la situación no se ha remediado.
Los bonos 2020, resultado de un canje de deuda de bonos Pdvsa 2017, en octubre de 2016, están respaldados por una participación de 50,1% en Citgo Holding Inc., brazo de refinación de Pdvsa en los Estados Unidos.
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