Mientras tanto, las medidas anunciadas por el presidente Barack Obama que flexibilizan la compra de puros y alcohol por parte de los visitantes estadounidenses a la isla son «simbólicas», indicaron empresarios de la firma Habanos S.A.
«Estimamos que en los primeros años podríamos estar teniendo una cuota de mercado de entre 25-30%», dijo a periodistas José Luis Fernández Maike, vicepresidente de la corporación internacional Habanos S.A. «Seríamos líderes del mercado norteamericano», agregó.
Habanos S.A., integrada por Altadis -con sede en España aunque de propiedad británica- y la estatal cubana Cubatabaco, tiene el monopolio de la comercialización de los puros isleños, considerados entre los mejores del mundo.
Fernández Maike desestimó que por lo pronto las medidas anunciadas por Obama tras la histórica decisión de Washington y La Habana de normalizar las relaciones tenga un impacto en el corto plazo.
«La posibilidad de adquirir 100 dólares entre tabaco y alcohol no nos parece mucho tampoco, no es algo que va a explotar nuestras ventas. Es un simbolismo para nosotros», dijo.
Aunque Raúl Castro y Obama mostraron su disposición a restablecer las relaciones rotas por cinco décadas, hasta ahora siguen vigentes un conjunto de sanciones por parte de Washington a la isla -impuestas para modificar su sistema político- que impide la comercialización de productos cubanos.
Según la firma la posibilidad de ingresar al mercado estadounidense no irá en detrimento de la calidad.
«Es cierto que tenemos nuestro plan de contingencia preparado», comentó Javier Terres, otro de los vicepresidentes de Habanos S.A. «Creemos que tenemos capacidad para satisfacer la demanda hoy en día de cualquier consumidor, incluyendo los consumidores del mercado americano con el actual portafolio de marcas».
La firma maneja 27 marcas entre ellas Cohiba, Romeo y Julieta, Montecristo o Vegueros, todas compuestas por puros hechos completamente a mano con tabaco cubano de primera calidad.
Fernández Maike informó que los ingresos del grupo en 2014 fueron de 439 millones de dólares, un punto porcentual menos que en 2013.
La leve caída, indicaron Fernández Maike y Terres, obedece a problemas climatológicos, políticas arancelarias en Europa y conflictos en el Medio Oriente, uno de los principales mercados del grupo.
Por países los principales ingresos de la empresa fueron España, seguido de Francia, China, Alemania y Suiza.
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