«Volkswagen no cumplió nuevamente sus obligaciones de ajustarse a las leyes que protegen la calidad del aire que respiran los estadounidenses», dijo Cynthia Giles, responsable citada por la EPA en el comunicado.
La gigante automotriz desmintió enseguida estas acusaciones. «Ningún programa fue instalado en sus diésel tres litros V6 para modificar de manera inapropiada» los controles de polución, afirmó Volkswagen en un comunicado.
Hasta ahora, la investigación sobre este tema contra Volkswagen implicaba a motores diésel de dos litros de cilindrada en automóviles de media gama: VW Jetta, Jetta Sportwagen, Beetle, Audi A3, Golf y Passat, según los modelos, entre 2009 y 2015.