Durante el foro de Venamcham De la seducción a la devoción. ¿Cómo identificar y retener al talento, el especialista sostuvo que conceptualmente Venezuela está en condiciones de pobreza extrema.
«Lamentablemente el empleo formal se está reduciendo de manera impactante. Los niveles de ocupación ya tienen dos años estancados», puntualizó.
Con respecto a tener un bono de alimentación más alto que el sueldo, dijo que desde 2015 Venezuela ha entrado en un proceso de desalarización.
Detalló que es factible entregar una cantidad mayor a la establecida por ley (Bs 18.585) pero subrayó la importancia de tomar en cuenta que en un futuro puede convertirse en parte del salario.
Sobre los pagos de bonos o salarios en dólares que están aplicando 46% de las empresas del país según una encuesta realizada por PGA Group, recomendó analizar con mucho detenimiento estos tipos de remuneración por ser más especializados.
Dijo que es importante corregir las distorsiones que ha producido el sistema cambiario que rige al país desde hace 13 años.
La abogada Emma Neher del bufete Juan Carlos Varela & Asociados, dijo que muchas empresas están trabajando con esa modalidad para proteger el poder adquisitivo de sus empleados.
Explicó que eso conlleva muchos riesgos pues la mayoría de las empresas no lo reflejan en sus nóminas, debido a que los pagos se efectúan en cuentas extranjeras.
Detalló que las compañías están utilizando la tasa Dicom de referencia para estos pagos, y como este índice fluctúa diariamente indicó que las empresas establecen un promedio para cancelar cada quincena.
Precisó que las empresas efectúan la conversión de dólares a bolívares con la tasa Dicom, a la cifra resultante que es reflejada en nómina se le aplican las retenciones correspondientes y luego el monto neto se traduce en divisas y es lo que se paga afuera al trabajador.
Señaló que los pagos en dólares tienen un impacto salarial y por lo tanto deben ingresarse trimestralmente a la base de cálculo de la garantía de prestaciones sociales. De igual forma, precisó que las utilidades así como el bono vacacional se ven impactados.
«Todo lo que das en contraprestación por un servicio es salario, independientemente de la moneda de pago, y ello debe incidir no solo en el cálculo de las prestaciones sociales sino también en los beneficios laborales», apuntó.