Jóvenes diseñadores turcos mostraron en conjunto esta semana sus colecciones en la Semana de la Moda de Nueva York, proponiendo estilos sin restricciones, a pesar de ser concebidos en una Turquía donde el uso del velo es cada vez más fuerte.
Es la primera vez en más de 70 años que creadores turcos exponen sus diseños sobre esta exclusiva pasarela, celebró Nilüfer Satorius tras la presentación colectiva el lunes, a la que contribuyó de forma importante.
Graduada en la prestigiosa Escuela Superior de artes y técnicas de la moda (Esmod) de París, la joven diseñadora creó su marca homónima hace diez años y vive en Nueva York.
Aunque Estambul tiene su propia Semana la Moda desde 2009, esta diseñadora apuesta a lo que ofrece la pasarela de la Gran Manzana en términos de proyección.
«Es un debut para nosotros», dice. «Si todo va bien, podríamos volver con otras marcas» para la próxima semana de la moda de la Gran Manzana, en febrero, añade la diseñadora.
Los otros cuatro diseñadores que exhibieron sus colecciones están basados en Estambul. Y, a excepción de Erol Albayrak, acaban de entrar al mundo de la moda.
Alentados por sus mayores, como Bora Aksu que desfiló en Londres y cuyas piezas se venden en Harrods, todos aspiran a ingresar a la gran escena de la moda, que supera fronteras.
Los materiales apuntan a las calidades de confección y artesanales de Turquía, reconocida en todo el mundo.
Gizem Ogan Yazgan, gran sacerdotisa de House of Ogan, utiliza principalmente el reverso del cuero con tinturas de colores pasteles para vestidos, faldas, pantalones y shorts.
«Tenemos una historia rica que remonta hace muchos años, con joyeros y artesanos del cuero», explica. «Quiero utilizar esta herencia y darle un toque de modernidad para crear modelos nuevos para el mundo entero».
– La influencia del velo islámico –
Estos jóvenes diseñadores no hacen una moda turca, sino una moda de época, que pueda llegar a todos.
Aunque son bastante reticentes a dar declaraciones, ellos aseguran, sin embargo, apartarse de la creciente influencia del islam en el espacio público de Turquía, simbolizada con el aumento del uso del velo.
País laico desde hace cerca de un siglo, Turquía autorizó en los últimos años el uso del velo en las universidades (2008), los organismos públicos (2013) y en los colegios (2014).
Los vestidos largos con un tajo de House of Ogan con bordados y transparencias de Erol Albayrak dan testimonio, a pesar de todo, de una libertad de expresión total.
«Nadie pone presión sobre nadie. No sentimos eso», afirma Nihan Topaloglu, creadora en Atelier Caché.
«La presión, la tenemos permanentemente», estima por el contrario Gülfem Erdavran, miembro del trío 113 Studio. «Intentamos no pensar en eso y preocuparnos de ser creativos», dice la joven.
¿Pero una musulmana puede usar las prendas de uno de esos diseñadores? «Es su elección, la forma en la cual quieran vestirse. No es un problema», afirmó Nilüfer Satorius.
«Nosotros creamos para inspirar a la gente», agregó Gülfem Erdavran, para «llevarla a usar nuestras vestimentas sin preocuparse del resto».
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