El tema, lanzado sin previo aviso por Rimas Entertainment y OVO Sound, la empresa de Drake, combina los ritmos que han colocado a ambos en la cima de las carteleras musicales a nivel mundial.
Con su participación en «Mía», Drake sigue los pasos de estrellas como Beyoncé, Demi Lovato y Selena Gómez, quienes lograron cosechar éxitos en la lengua de Cervantes con la ayuda de artistas del género urbano.
Beyoncé colaboró con J.Balvin en «Mi gente», Demi Lovato con Luis Fonsi en «Échame la culpa» y Selena Gómez sacó la semana pasada «Taki taki», un trabajo con DJ Snake, Cardi B. y Ozuna.
Sin embargo, el precursor del fenómeno y el más exitoso es el también canadiense Justin Bieber, quien empujó la locura de «Despacito» en 2017, cuando decidió hacer un remix del tema con una mezcla de inglés y español.
El primer experimento de Drake fue en 2014, cuando colaboró en «Odio», una bachata de Romeo Santos. En «Mía», Bad Bunny le hace referencia con la frase «soy Romeo, pero no Santo».
El tema salió acompañado de un video musical, filmado hace dos semanas en Miami y dirigido por Daniel Lugo, quien se ha especializado en videos de música bailable y urbana como «Te boté», de Casper, Nio García, Darell, Nicky Jam, Bad Bunny y Ozuna, que ha sido reproducido en 1.277 millones ocasiones en YouTube.
El rapero canadiense es una de las grandes estrellas de la música actual y este verano colocó siete canciones entre los diez primeros puestos de la lista Hot 100 de Billboard, superando así a los Beatles, que en 1964 ubicaron simultáneamente cinco temas en la principal lista de popularidad musical en EEUU.