Dan de baja a alias "El Colombia" en la frontera del Táchira
La lucha entre fuerzas irregulares por mantener el control de la zona y recuperar las finanzas origina enfrentamientos que dieron con la muerte del paramilitar colombiano.
La lucha entre fuerzas irregulares por mantener el control de la zona y recuperar las finanzas origina enfrentamientos que dieron con la muerte del paramilitar colombiano.
El Ministerio Público acusó a Leiver Padilla Mendoza por su presunta responsabilidad en la muerte del diputado oficialista, Robert Serra, y su asistente María Herrera en octubre de 2014 en la residencia del parlamentario, ubicada en La Pastora, en Caracas.
Está tras la rejas —pese al eufemismo “privado de libertad—, es chavista porque así se reconoce y está involucrado en un crimen de sangre: el asesinato de Robert Serra. Se llama Leiver y, aunque Nicolás Maduro ya lo sentenció, es convicto pero no confeso Mapa del hecho
El diputado recordó cuando, hace aproximadamente un año, hizo la denuncia sobre una red paramilitar coordinada por Vélez.
El número dos del chavismo debe responder ante la justicia por supuestamente estar involucrado en el crimen de Robert Serra
Un tribunal de control de Caracas ordenó que Leiver Padilla Mendoza permanezca detenido en la sede policial por el asesinato del diputado Robert Serra
Alias "El Colombia" también está solicitado por el asesinato de María Herrera.
Como se tenía previsto, Leiver Padilla, alias "El Colombia", presunto asesino del diputado del PSUV, Robert Serra, arribó este sábado al aeropuerto de Maiquetía, luego que el gobierno de Colombia autorizada su extradición.
El pasado 6 de mayo, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, autorizó la extradición de Leiver Padilla Mendoza, a través de la resolución ejecutiva 069 de 2015.
A un año del asesinato de Robert Serra, Leiver Padilla sobrevive encerrado en un calabozo del Sebin, mientras denuncia estar siendo envenenado. Aislado, ratifica su inocencia y señala a otro de los imputados como verdadero homicida. En tanto el poder lo acusa sin vacilar, él hace lo imposible por decirle a su madre que más que pena máxima, pareciera que alguien lo quiere muerto La justicia aún no toca la puerta de la familia de Robert Serra. Hace un año, el 1 de octubre de 2014, los asesinos no necesitaron hacerlo en la casa del diputado, cuando acabaron con su vida. 12 meses, mil declaraciones y anuncios y varias marchas después, lo que hay es vacío. Zulay Aguirre, madre del fallecido y candidata a heredar su curul en la Asamblea Nacional, cruzó palabras con quien fue señalado como el autor material del crimen, Leiver Padilla Mendoza, alias "El Colombia". Fue justo al momento en que lo llevaban a juicio, el 19 de agosto de este año. Ella dijo, mirándolo a la cara, “quiero la pena máxima para el asesino de mi hijo”. El acusado apenas pudo atinar una respuesta, formulada sin premeditación: “señora, yo no soy el culpable de esa muerte, algún día saldrán a relucir los nombres de los verdaderos asesinos”. La frase, más que una defensa, es un juramento que Leiver está convencido se cumplirá, aunque no dependa de él. Detenido en los calabozos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en Caracas, ha tenido poco contacto, o casi nulo, con sus familiares. Una y otra vez han intentado verlo, sin éxito. Solo a través de mensajes compartidos por visitantes de otros detenidos, quienes comparten sangre en las venas con Padilla, han logrado saber sobre su estado y cotidianidad dentro del calabozo. Así también formula denuncias “El Colombia”. “Cree que lo están envenenando poco a poco, porque todo lo que le dan de comida lo vomita enseguida. No lo sacan al baño y está en una celda sucia, llena de excrementos y vómito”, refieren, entristecidos, los parientes de quien, según Nicolás Maduro, actuó bajo las órdenes de “Julito Vélez”.
El diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), Freddy Bernal, afirmó en el programa "Entre Todos" del canal oficialista VTV a las 6:18 de la mañana que el motivo del homicidio del diputado Robert Serra fue una diferencia con su jefe de escoltas.