Gente

Ignacio Echeverría: Tres años sin el héroe de la patineta

El 3 de junio de 2017, y solo con su patineta, el español Ignacio Echeverría salvó varias vidas al enfrentar a yihadistas en el mercado de Borough, cerca del puente de Londres. Su familia lo recuerda en este aniversario con una misa en Madrid

Publicidad
ignacio echeverría
Cortesía de la familia Echeverría Miralles

Ya sabemos que no todos los súperheroes usan capa para volar. Algunos prefieren andar en patineta. Ignacio Echeverría era uno de ellos.

La noche del 3 de junio de 2017, hace exactamente tres años, este héroe de 39 años mostró sus poderes. Eran las 11 pm pero Londres estaba animada. El cálido clima invitaba a pasear, a comer algo al aire libre, a juntarse con los amigos. Y eso era precisamente lo que hacía Ignacio, disfrutaba de un paseo en bicicleta con amigos, mientras llevaba su patineta a la espalda, en una mochila.

Cerca del tradicional mercado de Borough, por el puente de Londres, vio a un hombre pegando a una mujer.  Y su fibra de súperheroe lo impulsó a defenderla. Con una veloz secuencia de movimientos, dejó la bicicleta, sacó la patineta y llegó en un santiamén hasta el lugar.

Lo que recibía la chica no eran golpes sino puñaladas. Al ver a Ignacio, el atacante, que en realidad era un yihadista en un acto terrorista, soltó a la muchacha y atacó con su cuchillo a un policía que corrió hacia él. Ignacio comenzó a golpear al atacante con su patineta mientras alertaba a otros agentes. Dos terroristas más apuñalaron a Ignacio por la espalda. Incluso herido forcejeó con ellos y los retuvo, permitiendo a quienes estaban en el lugar ponerse a salvo.

Esa noche los atacantes planearon acercarse a la concurrida zona de Borough y apuñalear a la mayor cantidad de personas que podían. Ignacio frustró sus planes, cuando intervino para ayudar a la primera víctima.

¿Cuántas vidas salvó en esos pocos minutos este valiente? La joven francesa se salvó por su intervención. También el primer policía. Y muchos otros que pudieron resguardarse mientras retenía a los otros dos atacantes.

Pero él murió.

El desafío de encontrarlo

Lo sabemos: las sociedades no suelen ser agradecidas con sus súperheroes. Los reconocen después, cuando los extrañan. Así pasó con Ignacio. Su cuerpo desapareció en el laberinto burocrático inglés. Los primeros días sus familiares no sabían, ni siquiera, si había sobrevivido.

Los amigos de Ignacio, con los que había estado paseando en bicicleta unos minutos antes y quienes fueron testigos de ese complejo momento de horror y heroísmo, se ocuparon de avisar a su hermana Isabel, residente en Londres, a las autoridades consulares y de ayudar a buscarlo. Nadie daba razón. Ni hospitales ni morgues. El cuerpo de Ignacio estaba desaparecido.

Las autoridades inglesas demoraron 72 horas en contactar a Isabel Echeverría para notificarle que este joven español era uno de los ocho fallecidos en el ataque. Una semana entera más tarde, el cuerpo de Ignacio fue repatriado a España para recibir sepultura.

Las medallas y las condecoraciones llegaron después. Recibió la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil, la Orden del Mérito Policial, la Gran Cruz de la Real Orden de Reconocimiento Civil a las Víctimas del Terrorismo, la Medalla de Jorge y la Medalla de la Comunidad de Madrid. Además, un parque de skate lleva su nombre.

En octubre de 2019, su padre Joaquín escribió un libro sobre la vida y muerte de su hijo, cuyas ventas estarían destinadas a beneficiencia, para seguir haciendo el bien en su nombre.

ignacio y su papá
Cortesía Joaquín Echeverría / @Jea60930295

«La actuación de Ignacio Echeverría aquel día fue admirable, y demostró una generosidad extraordinaria al correr sin protección alguna hacia unos asesinos armados con cuchillos para intentar proteger a otras personas», dijo seis meses después del atentado el embajador británico en Londres, Simon Manley, cuando le otorgó postmortem la medalla de la policía de su país.

¿Quién era este héroe?

Ignacio Echeverría Miralles vivía en Londres desde hacía varios años. Trabajaba como abogado de un banco. Se graduó en las universidades de La Sorbona en París y la Complutense en Madrid. Dominaba tres idiomas y era amante del skateboard, del surf, del squash y del golf.

«Mi hijo era un hombre normal capaz de hacer cosas extraordinarias. Quiero pensar que hay mucha gente como él», dice su padre Joaquín Echeverría Alonso.

En las fotografías familiares, Ignacio siempre sale con una sonrisa. Así aparece en las típicas fotos grupales, o capturado distraído en un momento que miraba a alguno de los niños de la familia. En varias aparece con su patineta, haciendo skate o cargándola en la mano.

Cómo imaginar que un pedazo de tabla con cuatro ruedas era el arma secreta de este súper héroe.

ignacio echeverría
Fotos: Cortesía de la familia

Hoy, que se cumplen tres años de su partida, y casi a la misma hora, a las 8 pm de España, su familia invita a una misa en la iglesia de Las Rozas, en Madrid. En esa comunidad vivió desde los 9 años, cuando junto con sus padres y sus dos hermanos se mudaron desde La Coruña. En Las Rozas, formó parte del grupo de Acción Católica. En Londres trabajaba en el banco HSBC, en prevención de blanqueamiento de capitales.

Publicidad