Trump hizo esas declaraciones antes de reunirse con el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, en su club privado de Mar-a-Lago, en Palm Beach (Florida) y poco antes del encuentro del 27 de abril entre el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, y el presidente surcoreano, Moon Jae-in.
«Corea del Sur va a reunirse, tiene planes de reunirse con Corea del Norte para ver si pueden poner fin a la guerra y tienen mi bendición sobre eso», afirmó Trump.
El propio mandatario se reunirá con Kim «al principio de junio o antes de eso, asumiendo que todo sale bien», según dijo el propio mandatario estadounidense.
Trump tiene previsto abordar el diálogo con Corea del Norte en una reunión con Abe, al que consideró «un perfecto caballero» poco antes de la reunión en un mensaje por Twitter.
El protagonismo asumido por Seúl y Pekín en los contactos previos a las cumbres con Corea del Norte ha dejado en un segundo plano a Tokio, donde el Gobierno de Abe siempre se ha mostrado escéptico respecto al diálogo con el Norte.
En ese aspecto, el mandatario nipón pedirá al estadounidense que aborde con Kim el asunto de los japoneses secuestrados por Pyongyang y el cese de todos sus pruebas de misiles.
«Quiero confirmar que se mantendrá la máxima presión sobre Corea del Norte para conseguir la destrucción completa, verificable e irreversible de su arsenal nuclear y balístico», insistió Abe en declaraciones a la prensa antes de partir a Estados Unidos.
Sobre la mesa también estará el giro proteccionista de la Casa Blanca, que planea imponer tarifas sobre las importaciones de acero y aluminio a varios países, entre ellos Japón.
Según dijeron este 17 de abril funcionarios estadounidenses, el Gobierno de Trump está considerando la posibilidad de hacer concesiones a Japón e incluirle entre los países exentos de esas tarifas.]]>