«Han tratado de fracturar la unidad en los mecanismos de integración» de la región como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), afirmó Díaz-Canel, en referencia a Washington, durante su primera entrevista tras casi cinco meses en el poder, concedida a la cadena venezolana Telesur.
«Los americanos no quieren que Cuba se repita en ningún lugar de América Latina», aseguró el mandatario, quien específicamente acusó al gobierno de Donald Trump de «presionar a los pueblos» de la región mediante estrategias políticas y económicas para adoptar «una posición contraria a Venezuela».
Aseveró que, en connivencia con la oligarquía venezolana, EEUU ha tratado de desestabilizar el gobierno de Nicolás Maduro mediante «guerra no convencional», promoción de la «violencia dentro de la sociedad» y «bloqueo económico y financiero».
Remarcó, sin embargo, que los adversarios del gobierno de Maduro «se golpearon con la puerta» ya que éste «sigue resistiendo».
Díaz-Canel aludió al papel de Cuba como anfitriona del proceso de paz de Colombia, al haber sido sede de las conversaciones entre el gobierno de ese país y la guerrilla de las FARC, culminadas en 2016, y acoger ahora los diálogos con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), actualmente en suspenso.
«Tenemos que apoyar la lucha por la paz en Colombia», expresó el presidente cubano, tras subrayar su deseo de que «las partes puedan conversar y resolver» sus diferencias.
La entrevista a Díaz-Canel, emitida en diferido y supuestamente grabada días atrás -Telesur no especificó la fecha-, acaparó interés en Cuba, al ser la primera que concede el mandatario, de 58 años, desde que el pasado 20 de abril asumió el mando del país de manos de Raúl Castro.
A lo largo de más de una hora y media, el líder cubano repasó diversos asuntos de actualidad, desde el nuevo proyecto de Constitución del país hasta los retos económicos y los efectos del embargo que EEUU impone a la isla.