En una rueda de prensa desde el puente Tienditas, zona fronteriza entre ambas naciones, y en compañía del presidente colombiano Iván Duque, reconoció que camiones con suministros se trasladaron hacia Cúcuta para entrar al país.
Guaidó recordó que cada movilización organizada por la oposición este año, incluida la planificación para la entrada de la asistencia, ha sido pacífica y responsabilizó a Nicolás Maduro ante cualquier hecho violento que manche la jornada.
Esta primera etapa de ayuda servirá para atender aproximadamente a 300.000 personas; no obstante, es solo un primer paso para lo que aspira concretar a corto plazo el Parlamento.
El representante de Voluntad Popular mantuvo la puerta abierta a los miembros de la Fuerza Armada que deseen unirse a su gobierno e indicó que la Ley de Amnistía está ahí para ayudarlos, palabras que llegaron en una fecha en la que cinco miembros cruzaron hacia Colombia para pedir asilo.
Por su parte, Duque manifestó que todo aquel miembro de la milicia que no deje entrar la ayuda humanitaria estará cometiendo un crimen de lesa humanidad y que el ejercicio de este 23 de febrero es de carácter pacífico: «La ayuda humanitaria va camino a Venezuela de manera pacífica para salvar vidas».