«Los venezolanos no pueden salir solos de esta situación, muchos se mueren de hambre, por una situación similar a la que Europa vivió durante la Segunda Guerra Mundial. Es una vergüenza para América Latina», lamentó el político al denunciar «los daños que causa el comunismo».
el funcionario aseguró que toda la región latinoamericana estaba gobernada por «presidentes socialistas» y opinó que «la gente ya no quiere esto» y se mueve hacia el conservadurismo y hacia gobiernos «abiertos al mercado» como, dijo, el de su padre.
El diputado brasileño, que inició este miércoles una visita de dos días a Hungría, afirmó también que quiere aprender del Gobierno nacionalista de este país cómo enfrentarse a George Soros, el millonario estadounidense de origen húngaro señalado como enemigo por muchos partidos ultraderechistas europeos.
«Tampoco me gusta George Soros. No nos gusta lo políticamente correcto, quiero aprender sobre eso aquí en Hungría», dijo Bolsonaro ante la prensa tras reunirse con el ministro de Exteriores húngaro, Péter Szijjártó.
Se espera que Eduardo Bolsonaro tenga mañana un encuentro con el primer ministro húngaro, el nacionalista Viktor Orbán.
Según Bolsonaro, Soros financia a grupos radicales violentos, aunque no concretó a qué organizaciones se refiere.
Por su parte, Szijjártó destacó que los Gobiernos de Hungría y Brasil comparten la defensa de los valores cristianos y de los intereses nacionales, y que ambos rechazan la inmigración.
Orbán fue el único jefe de Gobierno de países de la Unión Europea que asistió a la toma de posesión de Jair Bolsonaro.
Después de su visita a Hungría, Bolsonaro hijo se reunirá en Italia con el viceprimer ministro, el ultranacionalista Matteo Salvini.