Medios de comunicación locales, como CNN y Fox News, indicaron cerca del mediodía que agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) estaban actuando de acuerdo con lo previsto, citando fuentes no identificadas de esa fuerza. Sin embargo, no se informó ninguna operación significativa en las calles.
Muchos activistas patrullaron por varias ciudades para documentar cualquier arresto y aconsejar a posibles detenidos.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, aseguró a media tarde: «Aún no hay actividad».
«Es muy difícil organizar su vida en torno a los anuncios de Donald Trump», dijo el candidato a la candidatura demócrata para las presidenciales de 2020.
El alcalde agregó que el sábado se habían reportado tres redadas, en ningún caso exitosa.
El subdirector del ICE, Matthew Albence, se negó a dar detalles sobre los operativos, en una entrevista del domingo con «Fox News Sunday». Lo mismo había hecho antes Ken Cuccinelli, director interino de la Oficina de Servicios de Ciudadanía e Inmigración en la Casa Blanca.
La operación parece más modesta que los «millones» que Trump había prometido que serían detenidos y expulsados, pero eso no ha aliviado la angustia de los que temen ser el objetivo.
A sus preocupaciones se suman reportes que señalan que el ICE está preparado para detener no solo a los que cuentan con ordenes de expulsión, sino también a otros migrantes indocumentados que puedan encontrar eventualmente.
Eso podría incluir a migrantes que han estado en el país por años, con casa, trabajo e hijos, que son ciudadanos estadounidenses