Según reporta el portal Infobae, Jester tenía apenas un día en la nación caribeña cuando empezó a presentar problemas respiratorios. Tras empezar a vomitar sangre, pidió una ambulancia y murió pocas horas después en el hospital.
La madre de Jester, Melody Moore, explicó que «el día antes de su muerte hablé con él y me dijo que la estaban pasando muy bien». Asimismo, precisó que lo único extraño fue que su hijo se quedó de que había consumido un refresco que «no sabía nada bien», pero que fuera de eso, todo parecía ir de «maravilla».
Infobae precisa que otros 12 turistas estadounidenses en República Dominicana han muerto en circunstancias inusuales desde junio de 2018, entre ellos Vittorio Caruso, de 56 años, quien enfermó el pasado 17 de junio tras consumir una bebida en el hotel donde pernoctaba. Las autopsias confirmaron que la mayoría de las víctimas fallecieron a causa de una necropsia pulmonar.
El ministro de Turismo dominicano, Francisco Javier García, aseguró que las muertes recientes se atribuyeron a «causas naturales» y atribuyó los reportes a una «campaña malintencionada» que persigue afectar la actividad turística del país.
Con información de Infobae.