Alemania empieza este lunes a dar los primeros pasos hacia una nueva normalidad con un proceso de reapertura de algunas tiendas y comercios del país. Es parte de la primera fase de una operación de levantamiento gradual del confinamiento emprendida tras afirmar que la pandemia de coronavirus en ese país está “bajo control”.
La reapertura de comercios forma parte de un plan de desconfinamiento elaborado por el Gobierno de Angela Merkel con los dirigentes de los 16 estados federados del país tras lograr un objetivo intermedio en la lucha como la pandemia de ralentizar el ritmo de contagios, según explicó la canciller. Alemania tiene 135.000 casos de coronavirus oficialmente registrados y en torno a 4.000 fallecidos.
En esta nueva fase, tiendas de alimentación, librerías y concesionarios de automóviles, entre otros, podrán volver a levantar sus persianas este lunes en algunos estados federados, siempre que su superficie no supere los 800 metros cuadrados.
Dos semanas para reabrir escuelas
Además, los colegios empezarán a abrir paulatinamente sus puertas a partir de la próxima semana, aunque con restricciones. En Berlín, por ejemplo, este lunes empiezan los exámenes para el último curso de bachillerato y el 4 de mayo volverán a los colegios otros cursos de manera escalonada y en grupos más pequeños de lo habitual.
A pesar de este comienzo de reactivación de la economía, Merkel advirtió que “esta etapa ganada” es “frágil”. La canciller insistió en que no se trata de una carrera de velocidad, sino de un maratón.
Para evitar que empeore la situación, se mantendrán por el momento algunas restricciones a largo plazo. Por ejemplo, los certámenes con asistencia masiva seguirán prohibidos al menos hasta el 31 de agosto y no se descarta que la medida se prolongue.
En el estado de Sajonia será obligatorio llevar mascarillas para entrar en las tiendas y en otros estados se recomienda hacerlo aunque no sea obligatorio.