El Consejo de la Unión Europea, organismo rector de las grandes políticas del bloque comunitario de 27 países, anunció este lunes 13 de noviembre que acaba de renovar por otros seis meses, en vez de un año, las sanciones al gobierno de Venezuela. Las medidas restrictivas estarán vigentes hasta mayo de 2024, mientras el bloque sigue de cerca la situación política del país.
«Las medidas restrictivas de la UE sobre Venezuela, en vigor desde noviembre de 2017, se impusieron en respuesta al continuo deterioro de la democracia, el Estado de Derecho y los derechos humanos en Venezuela, para contribuir a fomentar soluciones democráticas compartidas con el fin de aportar estabilidad política al país y permitirle abordar las necesidades acuciantes de la población», señala la Unión Europea en un comunicado oficial.
«Estas medidas selectivas son flexibles y reversibles y están diseñadas para no perjudicar a la población venezolana».
Consejo Europeo
«Las medidas restrictivas adoptadas por el Consejo de la Unión Europea a la vista de la situación en Venezuela son un medio para fomentar un proceso creíble y significativo que conduzca a una solución pacífica negociada dirigida por Venezuela. El Consejo recuerda que estas medidas son selectivas, graduales y flexibles y que pueden reducirse o anularse en función de los progresos realizados en el restablecimiento de la democracia, el Estado de Derecho y el respeto de los derechos humanos en Venezuela».
En el comunicado, el Consejo señala que «acoge con satisfacción» el acuerdo político liderado por Venezuela del 17 de octubre de 2023, en Barbados, «que representa un paso positivo y necesario en la continuación de un proceso de diálogo integrador y hacia la restauración de la democracia en Venezuela».
«En este contexto y en el marco de la revisión anual de sus medidas restrictivas, el Consejo ha decidido acortar excepcionalmente de 12 a 6 meses la duración de la próxima renovación».
El Consejo Europeo apuesta así a que fructifique el proceso de negociaciones que mostró cierto avance en septiembre con el acuerdo firmado en Barbados entre el gobierno de Nicolás Maduro y una parte de la oposición, con Estados Unidos como fiador.
Ese acuerdo llevó al gobierno de Joe Biden a levantar de manera condicional por seis meses buena parte de las sanciones aplicadas a los sectores de petróleo, gas, oro y financiero de Venezuela.
Todavía el régimen de Nicolás Maduro y la oposición se mantienen enfrentados por el reclamo opositor de permitir elecciones libres, democráticas, transparentes y sin candidatos proscritos por procesos administrativos de claro matiz político, como el aplicado contra la candidata María Corina Machado, ganadora por amplio margen de la elección primaria del 22 de octubre.
El Consejo de la UE «está dispuesto a tomar medidas y considerar la flexibilización o la revocación de las medidas restrictivas en función de la evolución de la situación y de la aplicación de este acuerdo político».
Las sanciones de la unión Europea contra el gobierno de Nicolás Maduro y sus principales protagonistas incluyen un embargo de armas y equipos usados para reprimir a opositores, y sanciones individuales personales a 54 miembros de la cúpula chavista en el poder, así como el congelamiento de los activos que les han sido detectados en países Europa.
«En relación con la última revisión de las medidas, se eliminó de la lista a una persona fallecida», aclara el comunicado sin mencionar nombres.
En el último año murió la ex rectora del Consejo Nacional Electoral Tibisay Lucena, pieza clave del Poder Electoral que facilitó la permanencia del chavismo en el control de Venezuela durante las últimas dos décadas.
El Consejo agregó que además está dispuesto a dar pasos y a considerar la flexibilización o la revocación de las medidas restrictivas si hay avances «hacia la liberación incondicional de todas las personas injustamente detenidas, la libertad de expresión, incluida la de los miembros de la prensa, la independencia del proceso electoral y de las instituciones judiciales que permitan unas elecciones creíbles, integradoras, transparentes y democráticas, y el respeto de los derechos humanos y políticos».
«El Consejo volverá a evaluar el alcance de sus medidas restrictivas dentro de seis meses y está dispuesto a volver a tratar este asunto en cualquier momento sobre la base de avances concretos, sostenibles y verificables en relación con la situación en Venezuela», agrega el texto.
Reacciones de Maduro
Por su parte, el gobierno de Nicolás Maduro, a través de la Cancillería, rechazó mediante un duro comunicado la decisión de la Unión Europea y dijo eso les «inhabilita de participar en los procesos políticos venezolanos».
«Con esta decisión, la Unión Europea refleja ante la Comunidad Internacional, una vez más, la continuidad de su política injerencista en los asuntos internos de la República Bolivariana de Venezuela, aplicando medidas degradantes, dañinas e injustas, que en este caso, pretenden castigar a ciudadanos venezolanos que ejercen sus funciones en el marco de la Ley», dice el comunicado.