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El desarrollo de los casos del "Hombre Búfalo" y el "Roba Atril" parece escrito por Adam Sandler

Jake Angeli y Adam Johnson son dos de los asaltantes al Capitolio estadounidense más conocidos por la opinión pública. Los medios de comunicación siguen los casos de estos dos simpatizantes de Donald Trump y lo que cuentan parece salido de una comedia de Netflix

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Jake Angeli y Adam Johnson

Uno se negaba a comer porque la comida no era orgánica y el abogado del otro le dice a los medios que no es mago para ayudar a su cliente. Si nos costaba, como espectadores, comprender lo que sucedía en el Capitolio estadounidense la semana pasada, el desarrollo de los casos de dos de los detenidos más ilustres, es más absurdo.

Empecemos con Jake Angeli, quien también se hace llamar Jacob Chansley, QAnon Shaman y Yellowstone Wolf; se viste con pieles en «honor» a los indígnas Sioux; adorna su cabeza con un gorro con cachos y se compara con Gandhi, Jesús, o Martin Luther King. La madre de este sujeto se quejó porque el detenido no había comido desde el viernes pasado debido a que el menú carcelario no ofrecía comida orgánica.

Jake Angeli

Martha Chansley le dijo el 11 de enero al periódico Arizona Republic que su hijo de 33 años «se enferma gravemente si no come alimentos orgánicos». Los alimentos que llevan la etiqueta «organic» (orgánico) han sido cultivados o criados sin fertilizantes químicos, plaguicidas, herbicidas, hormonas ni fármacos sintéticos. Sintéticos significa que han sido fabricados en un laboratorio. Esta alimentación parece responder a las creencias de Angeli, pues en su página de Facebook se describe como un «practicante del chamanismo».

Para suerte del «Hombre Búfalo», como le llaman algunos medios estadounidenses, este mismo lunes se resolvió la situación. La jueza de Arizona, Deborah Fine, ordenó a los alguaciles estadounidenses que trabajaran con el abogado del detenido para resolver el problema, lo que al final hicieron al aceptar servirle alimentos orgánicos, informó el New York Post.

«Cumpliremos con la orden del juez», dijo un alguacil a la estación de televisión local, y agregó que le proporcionarían alimentos que cumplan con sus exigentes restricciones dietéticas. Bien por la barriguita de Angeli, mucho más frágil que la de sus antepasados indígenas.

«No soy mago»

Luego tenemos el caso de Adam Johnson, de 36 años, quien fue fotografiado sosteniendo el atril de la oficina de Nancy Pelosi, Presidenta de la Cámara de Representantes, en el asalto al Capitolio el pasado miércoles. Obviamente dinero no le falta: fue liberado con una fianza de $25.000, el 11 de enero por la tarde.

Pero Johnson no tiene problemas estomacales ni de dieta. Pareciera, eso sí, que su caso es tan preocupante que su propia defensa, aparentemente, no tiene muchas esperanzas. El militante de Donald Trump está acusado de entrar o permanecer en cualquier edificio o terreno restringido sin autorización legal; un cargo de robo de propiedad del gobierno y un cargo de entrada violenta y conducta desordenada en los terrenos del Capitolio.

Pareciera, como lo reseña el portal BoingBoing, que la capacidad de Johnson para contratar abogados es tan buena como su juicio para llevarse el atril y sonreír a la cámara mientras delinque.  Tampa Bay News entrevistó a los abogados del acusado en los escalones del juzgado y las declaraciones del leguleyo Dan Eckhart parecen salidas de una comedia de Adam Sandler para Netflix. La conversación siguiente así lo demuestra.

Abogado: Podría ser peor, uh, ya sabe, podría ser peor, pero creo que parte de lo que debe, ya sabe, tener en cuenta es nuevamente, solo tiene que profundizar en lo que realmente sucedió. Hay una fotografía de nuestro cliente, ya sabe, en un edificio, um, ya sabe, sin autorización para estar allí, con, uh, ya sabe, lo que parece ser un podio o un atril, no estoy seguro de cómo se llama. Pero eso es lo que tenemos».

Periodista: Obviamente, eso presenta problemas para usted como abogado defensor, ya que tiene a su cliente en el edificio en el momento del robo.

Abogado: Sí. Sí. No conozco el, ya sabes. Cómo explicar eso. Pero sí, eso es, eso sería un problema. No soy un mago y tampoco el Sr. Digny (otro abogado). Sí, tenemos una fotografía de nuestro cliente que parece estar dentro del edificio federal o dentro del Capitolio con la propiedad del gobierno.

Entendemos que los hechos sucedidos la semana pasada en Estados Unidos, son realmente serios y apenas estamos viendo las primeras consecuencias, pero estos casos demuestran el nivel de una turba encendida por el mensaje de un mal perdedor, como ha sido Trump. La prueba, y con esto terminamos, es este video de la presentación de los abogados de Johnson:

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