Salud

El Alzheimer es un fin indetenible y la única receta para tratarlo es amor y cuidados

En el Día Mundial del Alzheimer, el Hogar La Ponderosa, un centro de cuidados de pacientes con algún tipo de demencia, promueve su experiencia replicable, más humana, para atender o a estos pacientes que perdieron sus recuerdos, sus referencias familiares y su salud mental a causa de esta verdadera epidemia del siglo XXI

Alzheimer y como tratarlo en La Ponderosa
Daniel Hernández |El Estímulo
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Es una casa enorme, de unos 500 metros cuadrados, del mejor estilo arquitectónico de la Caracas de los años 50 del siglo 20. Está rodeada de jardines verdes, llena de luz y grandes espacios abiertos. A lo lejos, desde los balcones, todavía se perciben trozos del imponente cerro el Ávila, pese a la invasión de nuevos edificios en Las Mercedes.

El lugar parece más bien una posada de cinco estrellas, atendida por gente amable y profesional, con una clara identificación emocional con sus “huéspedes”. Pero en esta bella casa a uno no le gustaría tener que vivir…a menos que sufras Alzheimer, o algún otro tipo de demencia, y en ese caso tampoco tendrías conciencia de ese espacio y ni sabrías donde estás.

Esta es la sede del “Hogar la Ponderosa”, residencia y centro integral para adultos mayores, donde unos 40 profesionales atienden hoy hasta a 12 pacientes internos y a varios más que pasan solo el día, para que reciban cuidados que sus familiares por alguna razón ya no pueden darles en sus antiguos hogares.

Se trata de un concepto innovador en Venezuela, que rompe con la práctica más habitual en los centros de reclusión privados o del Estado donde son llevadas y a veces depositadas personas con algún tipo demencia.

El método y la experiencia de La Ponderosa sirve de referencia y llamado de atención acerca de cómo enfrentar y sobrellevar el drama familiar de tener a una persona sufriendo de algún tipo de demencia o un implacable deterioro cognitivo.

Los responsables destacan dos necesidades clave de estos pacientes, en sus casas o en sus hogares sustitutos: “amor y atención”, en este caso atención personalizada profesional.

Esta es una experiencia valiosa en Venezuela, donde según estudios especializados avalados internacionalmente, en promedio cerca de 7,1% de los adultos mayores de 60 años padece algún tipo de demencia, o trastorno neurodegenerativo.

La dolencia más común en este universo es el Alzheimer.

La socialización en comunidad es parte del método para atender a los pacientes huéspedes en La Ponderosa. Foto: Daniel Hernández/El Estímulo

Un amenaza creciente

El doctor Aquiles Salas, director médico del Hogar La Ponderosa, y de la escuela de medicina Luis Razetti de la Universidad Central de Venezuela, señala que la prevalencia de estas enfermedades se multiplica progresivamente de acuerdo a la edad del adulto mayor.

«A medida que se envejece por encima de 65 años, estos números son todavía más dramáticos. Por ejemplo, en los mayores de 80 años tenemos una población donde cerca del 25% tiene alguna forma de demencia  y de esa forma de demencia la mas relevante, la más frecuente es el Alzheimer», explica Salas.

Es una población de personas mayores, con múltiples factores de riesgo, y otras enfermedades. Pero además tienen una enfermedad mental que  los deteriora.

«¿Qué significa la demencia? Es una pérdida de la capacidad individual de desenvolverse. Esto tiene impacto a nivel social, sanitario, económico y familiar», explica Salas.

Este médico internista y geriatra, ex-presidente del Centro Médico de Caracas, miembro del Grupo de la Investigación de las Demencias 1066 de la Universidad de Londres, director del Instituto Nacional de Geriatría y Gerontología, miembro del American College of Physicians, entre otras referencias, destaca la importancia de la atención más cercana, más humana para estas personas.

Refiere que siempre tuvo “mucha inquietud y aversión sobre lo que se hacía en algunos centros de atención del adulto mayor”.

En 990, durante su entrenamiento en Geriatría y Gerontología en la Universidad de Harvard (Estados Unidos), pudo convivir en un hospital donde residían más de 700 adultos mayores, y constatar los beneficios de tratamientos y cuidados a este sector de la población.

“Ellos vivían allí pero no convivían, sin embargo todos tenían en común un programa de atención y de estimulación, una atención personalizada decente y digna y eso me impactó. Creo que en nuestro país si es posible hacerlo y lo estamos demostrando con el Hogar La Ponderosa”, explica.

Alzheimer en La Ponderosa
Habitaciones compartidas en La Ponderosa ayudan a socializar a los pacientes huéspedes. Foto: Daniel Hernández/El Estímulo

Un método replicable

“Nos preocupa la parte humana. No se confundan , los trastornos neuro cognitivos no se curan, siempre van para abajo. Tratamos es de nivelarlos, les quitamos la depresión que viene con el trastorno neurocognitivo. Aparentemente se curan pero es que están más contentos», explica María Edith Anselmi, directora general de este emprendimiento que ofrece alternativas en un área tan difícil emocionalmente para familiares y cuidadores.

«Se mejora el aspecto social, disminuye la presentación de los síntomas. Lo que hace la depresión es que maximiza, o hace más evidenteslos olvidos o la dificultad para moverse incluso, al disminuir eso el funcionamiento tiende a mejorar», explica la doctora Katherine Vergara, coordinadora del Departamento de Psicología de la institución.

Estos profesionales trabajan con un conjunto de trastornos cognitivos que necesitan cierta especialización en todo el tratamiento que se hace. Hay una evaluación previa de los pacientes y en función de los resultados se planifica ejercicios de estimulación o rehabilitacióncognitiva para mantener aquellas funciones que todavía se encuentran preservadas.

Como son patologías que van poniéndose cada vez más complicadas, la idea entonces es mantener, el mayor tiempo posible, todas las funciones que conserva el paciente y estimular el resto de la funciones para que no se deterioren tan rápidamente.

En La Ponderosa les ofrecen musicoterapia, que se sabe ayuda a minimizar los síntomas conductuales asociados a los trastornos cognitivos y también estimula toda la parte de la memoria remota. La música hace que interactúen y se muevan, mientras la fisioterapia ayuda a que se mantenga la independencia el mayor tiempo posible.

Una larga trayectoria

Concretar el proyecto de este “centro para adultos mayores con trastornos neurocognitivos” tardó unos 10 años, abrió sus puertas en 2019, señala Anselmi, fundadora de esta empresa, junto con el doctor Salas, geriatra reconocido internacionalmente.

A propósito de celebrarse este 21 de septiembre el día mundial del Alzheimer, proclamado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1994 y auspiciado por Alzheimer’s Disease International (ADI) para llamar la atención sobre esta verdadera epidemia del siglo XXI, la experiencia de La Ponderosa es provechosa para fomentar nuevas formas de cuidar a los pacientes y sus familiares, en medio de un drama que se extienden en todos los países.

“Queremos ser el ejemplo para que todos los demás se copien de nosotros”, dice Anselmi.

Mucha gente conoce la enfermedad, muchos la tienen de cerca y aunque  no la tengan de cerca, van a tener amigos que tienen este tipo de enfermedad”, comenta Anselmi, visiblemente emocionada.

El modelo de atención de La Ponderosa, determina que los pacientes o “huéspedes” de la casa circulen libremente por sus espacios (siempre acompañados por un cuidador); que convivan en la jornada diaria, coman juntos en un amplio salón comedor; practiquen actividades recreativas y creativas; lleven una dieta balanceada que se suele romper con las travesuras culinarias del fin de semana y también que reciban a familiares y amigos en cualquier momento, y que estos allegados puedan pernoctar con ellos.

“Aquí no ponemos horarios de visita, los familiares y amigos pueden venir a visitarlos las 24 horas del día los 365 días del año. Para nosotros es súper importante ese contacto humano con las familias, y por eso es que las visitas son abiertas”, dice Anselmi.

Ella narra a los periodistas el caso de un piloto, hijo de una paciente que suele llegar entre 10 y 11 de la noche a visitar a su mamá y cuando puede se queda dormido al lado de ella.

“Muchas veces ellos no saben quiénes son sus familia, pero saben que son gente buena y gente que las quiere”.

Aquiles Salas
Areas sociales para pacientes de Alzheimer
Los espacios abiertos son parte de la terapia pàra los pacientes de Alzheimer y otras formas de deterioro cognitivo. Foto: Daniel Hernández/El Estímulo

«Ese es el llamado más importante: tenemos que buscar cómo atender a estos adultos mayores que pueden presentar además de la demencia otras patologías», insiste.

«Carecemos en el país y en muchos países, de una política de atención al adulto mayor. Cuando sumamos problemas sociales, económicos, de sostenibilidad y con un problema de dependencia física, encontramos un drama importante», acota.

«Los tratamientos terapéuticos que se deben ofrecer a esas personas en sus hogares o sus hogares sustitutos es darles estimulación cognitiva, apoyo emocional, sociabilidad, buena alimentación, ejercicio físico y recreación. Eso es lo que aspiramos que debe ofrecerse a todo adulto mayor»,

«Es una deuda importante de la ciencia  ofrecer un tratamiento permanente, eficaz, que mantenga a esta persona lo mayor tiempo posible con su independencia. Hay medicamentos para ayudar pero tienen un alcance bajo y no frenan ni curan la enfermedad».

“La familia puede apoyar siempre, solo que no se le puede exigir más de lo que puede dar, es así que surgen las instituciones que pueden ofrecer la posibilidad de que su ser querido reciba la atención adecuada, digna que se merece aun en estados avanzados de las demencias”, puntualiza.

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