El nuevo propietario de Twitter, Elon Musk, defendió el domingo su criticado lanzamiento de un servicio de suscripción pago para verificar las cuentas de los usuarios.
«La verificación generalizada democratizará el periodismo y empoderará la voz de la gente», tuiteó, respondiendo a las preocupaciones de asociaciones, anunciantes e incluso de Naciones Unidas, que temen un aumento de los discursos de odio y la desinformación en la red.
Con el nuevo plan, los usuarios que paguen 8 dólares al mes por el servicio de suscripción de la plataforma, llamado Twitter Blue, recibirán la marca azul que indica que la cuenta está verificada.
Esa característica se ofrece actualmente solo a las cuentas que cumplen ciertos requisitos, como ser de figuras públicas, un enfoque que Musk describió como un «sistema de señores y vasallos».
En los iPhones, la aplicación de Twitter ya menciona el nuevo servicio, pero su lanzamiento se aplazó al miércoles, un día después de las elecciones de mitad de mandato en Estados Unidos, según el New York Times.
«Twitter tiene que convertirse, con diferencia, en la fuente de información más precisa sobre el mundo. Esa es nuestra misión», tuiteó Musk el domingo. Sin embargo muchos observadores temen la irrupción de cuentas falsas.
Musk también señaló a los que suplantan a otros en la plataforma. «A partir de ahora, cualquier usuario de Twitter que se haga pasar por otro sin especificar claramente ‘parodia’ será suspendido permanentemente», tuiteó Musk, añadiendo que los seudónimos estaban permitidos siempre y cuando los usuarios no participen en un «engaño malicioso».