Viciosidades

Todo lo que debes saber sobre el 'Sexting'

Hoy día, el sexting se ha vuelto más frecuente entre las parejas con el objetivo de mantener encendida la llama del amor y la pasión a través de fotos, videos y audios con contenido erótico. Sin embargo, los problemas surgen cuando los archivos salen a la luz. Esto se debe a que en la mayoría de los casos alguno de los implicados decide publicarlos en forma de venganza hacia su pareja o por accidente

INFORMACIÓN: HUFFIGTON POST
Publicidad

Todos han oído comentarios despectivos y alarmistas sobre el sexting, algunos dicen que es vergonzoso, depravante o estúpido. No obstante, esto se ha convertido en una nueva forma de compartir el erotismo. Cada quien es su propio autor e ilustrador con la habilidad de crear historias provocativas de sí mismos. Pero, ¿existe el lado positivo del sexting? ¿Podría contribuir a que las relaciones sean más saludables y satisfactorias en los adultos? Diversos estudios hasta la fecha han dicho que sí. Es por ello que debemos tener en cuenta qué factores hacen la diferencia entre un buen sexting y un mal sexting. 

1. Consentimiento entusiasta

via GIPHY

No hace falta decirlo, pero el sentido común -además de las investigaciones- dicen que el sexting necesita ser mutuo y consensuado. Esta práctica tiene un mal nombre parcialmente porque muchas personas recibieron propuestas de fotos desnudas sin su consentimiento. Por lo tanto, esto se califica como un acoso sexual (no el sexting) y puede ser aterrador.

Un estudio publicado el mes pasado en el Journal of Interpersonal Violence, encontró que el 21 por ciento de los 885 estudiantes encuestados (la mayoría de ellos mujeres) habían sido obligados en algún momento a enviar mensajes sexuales. El estudio también vinculó el sexting forzado a «síntomas de problemas mentales, problemas sexuales y apego emocional», lo cual lleva a los investigadores a describirlo como una forma de abuso contra la pareja.

Sin embargo, esto conduce a la siguiente condición para tener un sexting exitoso:

2. Seguridad emocional, respeto y comunicación

via GIPHY

Ciertamente el sexting no es lo mismo que el sexo, en el sentido de que los cuerpos no están directamente interactuando. Por el contrario, se trata de mentes interactuando a través de los teléfonos. De la misma manera que el sexo florece en condiciones de seguridad física y respeto, también el sexting requiere de cierto grado de seguridad emocional que debe darse en ambas partes.

En este sentido, el sexting debe ocurrir con el consentimiento y honestidad de la pareja. Deben preguntarse: ¿Cómo se sienten realmente cuando se envían estos mensajes? ¿Qué clase de mensajes son aceptables y cuáles no? ¿En qué circunstancias (si hay alguna) las fotos o mensajes pueden ser compartidos?

Estos son puntos que deben tener en cuenta para lograr un sexting exitoso. Recuerden que esta es una manera de conocer a tu pareja, de comunicar tus necesidades y deseos. Estos mensajes nos permiten soñar en grande con la otra persona. Las malas lenguas dicen que quienes envían malos sexting, son malos amantes.

3. Presta atención al apego

via GIPHY

La dimensión más interesante de los estudios del sexting involucra la teoría del apego, la cual hace referencia a cómo la relación con nuestros padres durante la infancia moldean nuestras relaciones en la adultez. Las personas que crecen con miras a tener seguridad en sus parejas encuentran fácil el acto de intimar, mientras que aquellos con actitudes ansiosas o evasivas tienden a luchar con la cercanía y la cooperación.

Según la psicóloga de la Universidad de Indiana, Michelle Drouin, el sexting no es necesariamente malo. «En cambio, sirve más para quienes quieren mantener un poquito de distancia en su relación, (y mujeres que quieren mantener a su compañero cerca) y por lo tanto lo utilizan para satisfacer sus necesidades sexuales. Para estos individuos, el sexting ayuda a incrementar su satisfacción sexual».

4. Honestidad

via GIPHY

En un estudio realizado por Michael Drouin en 2014, encontró que casi la mitad de los 155 estudiantes universitarios heterosexuales a quienes se les aplicó la encuesta habían enviado mensajes falsos a sus parejas. Las mentiras más comunes eran acerca de la ropa que llevaban puesta o su grado de excitación al enviar los textos. En dicho estudio descubrieron que las mujeres mentían más que los hombres, pero mayormente lo hacían por el miedo a ser rechazadas por su compañero.

«Mentir durante el sexting, así como fingir un orgasmo tiende a ocurrir más entre aquellos que tienen inseguridades en su relación de pareja. Muchas personas consideran el sexting como una simple fantasía, lo utilizan para la calentar las cosas, y solo algunos son honestos en cuanto a lo que están haciendo», afirma Drouin. » El sexting es divertido e imaginativo. Si todo el mundo es consciente y está participando voluntariamente en la fantasía, puede ser muy placentero».

Si te interesó lo que acabas de leer, también debes saber las 7 claves para el “sexting” seguro (según Mashable)

Publicidad
Publicidad