Si acaso hay un mensaje, no queda claro. Hay, por supuesto, una estética bien definida, un concepto gráfico. Algunos celebran el ingenio para “burlar” la censura en Instagram. Hablan de desafío, de revolucionar algo. Lo cierto es que Kanye West ha elegido una manera extraña de promocionar sus nuevos zapatos deportivos Yeezy 500 Supermoon Yellow.
Porque los zapatos no serán lo que capte tu atención de inmediato. Ni más tarde. Ni al rato. En las fotografías hechas por Eli Russell Linnetz (viejo amigo de esta singular familia), con una estética limpia y despojada, el foco es otro: el parecido evidente de la actriz porno de origen cubano Lela Star con su esposa Kim Kardashian y también de las modelos conocidas como las Clermont Twins; las curiosas poses; los desnudos casi despojados de sexualidad (no todos, pero en general) y el hecho mismo de que las fotos hayan sido divulgadas inicialmente –este mes de junio- solo a través de redes sociales.
¿Venderá zapatos Kanye West? Seguramente. Lo que no se puede poner en duda es el éxito de la campaña, su potencia para viralizarse y poner a la gente a hablar de ella: un viejo truco (¿alguien recuerda a Benetton?), adaptado a los tiempos y al estilo Kanye West.