11 cosas que se consiguen en Petare

1)   Locaciones cinematográficas

 ¿Usted recuerda el videoclip de Michael Jackson o la película de Hulk con Edward Norton que se rodaron en las favelas de Río de Janeiro? Petare es nuestro equivalente. Los ranchos nos hacen sentir aprensión, pero también inspiración: la energía de la gente que quiere salir de abajo y que en teoría tiene mucho más sangre en las venas que los que nos encerramos en un apartamento (también son un preconcepto: hay ranchos de ranchos).

“Donde otros ven atraso, yo veo progreso. ¿Alguien se ha puesto a pensar en el esfuerzo que invierte la gente de menos recursos para mejorar su vivienda, con sus propias manos, aprovechando el fin de semana, a pesar de la desgracia de que ahora no consigan cemento?”, reflexiona el sociólogo venezolano Ramón Piñango. El intrincado océano de ladrillo y cinc de Petare (llámese José Félix Ribas, La Bombilla, 24 de Julio etcétera), considerada la segunda barriada más grande de Latinoamérica, ha servido de locación a sagas como Azotes de barrio y, en contraste, a videoclips pangolas con mensajes de motivación de Lasso, el Potro o Chino y Nacho.

2)   Golfiaos

Qué Cinabbon Rolls ni que ocho cuartos. La principal teoría acerca del origen del popular postre criollo con papelón, anís y queso e’ mano sostiene que fueron creados por dos vecinos de Petare, los hermanos Gregorio y María Duarte, a comienzos del siglo XX. Hoy, en el casco histórico (calle Pérez de León), el panadero Fran Suárez preserva la tradición.

3)   Productos desaparecidos

 Todo depende del ojo con el que se les mire. Para los partidarios de una economía planificada, los bachaqueros son una intolerable distorsión especuladora salvaje que debe ser desterrada de la faz de la Tierra. Para los que no tienen tiempo (o suerte) para las colas o simplemente necesitan urgentemente un papel higiénico, los alrededores del Metro de Petare, el núcleo endógeno por excelencia del bachaquerismo, pueden convertirse en una salvadora bendición, el respiradero no tan clandestino que siempre propicia todo sistema férreo de control de precios (bajo la amable supervisión de la Guardia Nacional, por cierto). Como diría el gran Humphrey Bogart: siempre nos quedará Petare. El único sitio de Venezuela en el que genuinamente sí hay de todo. Eso sí, lleve un ladrillo de billeticos de cien. 

4)   Un casco

Aunque pasa relativamente agachado y no hay mucha información de su programación en Internet o redes sociales, el Teatro César Rengifo (en el lamentablemente tampoco demasiado conocido casco colonial de Petare) es una de las principales referencias culturales del Oeste de Caracas: allí uno puede sorprenderse con un musical tipo Broadway protagonizado por chamos de los barrios o con un concierto de alguna agrupación emergente tipo La Pagana Trinidad. Los primeros domingos de cada mes, por cierto, la Alcaldía de Sucre organiza carteleras de actividades culturales alternativas en los alrededores de la Iglesia del Dulce Nombre de Jesús.      

5)   Un equipo solo de nombre

El equipo de fútbol Petare, heredero del antiguo Deportivo Italia, Chacao o Italchacao, se llama así desde 2010 pero jamás ha jugado en el municipio. La idea era que se convirtiera en algo como lo que representa el Rayo Vallecano, el Boca Juniors o el Arsenal para sus respectivos barrios de Madrid, Buenos Aires o Londres, pero como todo en este país, no se sabe cuando. Su mejor actuación desde entonces es un tercer lugar en el torneo Apertura 2011, bajo la dirección del entrenador Manuel Plasencia y con 13 goles de Richard Blanco. Sus últimas seis figuraciones en torneos cortos: 17º, 13º, 13º, 15º, 13º, 18º. En realidad, lo más parecido a una franquicia deportiva de Petare son las Panteras de Miranda, algo así como los Tiburones de La Guaira del baloncesto profesional (único título: 1995).

6)   Luis Sojo

 A pesar del tamaño de la parroquia, los hijos ilustres de Petare son relativamente pocos, entre ellos el cinco veces campeón de la Serie Mundial, compadre de Robert Pérez, muy discutido ex manager de la Vinotinto y del Magallanes y salsero frustrado. También Héctor Rodríguez, reconocido hasta por muchas opositoras como uno de los papirruquis de la Asamblea Nacional; el pintor ingenuo Bárbaro Rivas; el prócer Lino de Clemente; y muy probablemente Julián Castro, evaluado de manera casi unánime como uno de los peores presidentes de la historia republicana de Venezuela, en los tiempos de la Guerra Federal.

7)   Votos

Desde que se hacen elecciones regionales, los alcaldes del municipio Sucre han sido Enrique Mendoza (Copei, 1989-1995), un tal Raoul Bermúdez (1995-2000), José Vicente Rangel Avalos “Papi Papi” (chavismo, 2000-2008) y Carlos Ocariz (Primero Justicia, 2008 hasta hoy). Por su valor simbólico como principal bastión popular del Oeste de Caracas, Petare siempre ha sido evaluado como un botín tanto por el oficialismo como por la oposición. El PSUV nunca ha terminado de encontrar la fórmula: contra Petare se han estrellado candidatos como el Potro Álvarez, Jorge Amorín o Jesse Chacón (con frecuencia se alega que las urbanizaciones vecinas de clase media tipo El Marqués o El Llanito “distorsionan” los resultados). El 6-D, las cifras en la parroquia fueron contundentes: 144.727 votos para el hoy diputado Miguel Pizarro (64,91%) y 73.840 para el desaparecido en acción William Ojeda (33,11%).

8)   Hip hop

Donde hay barrios, hay hip hop. “Yo soy de Petare, lugar que es zona roja, voy a hablarte claro, no voy a caerte a coba, todos los días matan, todos los días roban, si eres asesino y tienes plata, te condecoran”. Así comienza la letra de Petare: barrio de Pakistán, célebre videoclip de Arvei Angulo, alias “El Prieto”, ex integrante del dúo Guerrilla Seca y probablemente el rapero de más estatus del municipio. Si no le gustan ese tipo de letras, recuerde: hay videoclips pangolas.

9)   Un coliseo

Y no es el que construyó Vespasiano en Roma. Nunca nadie ha sabido para qué sirve exactamente el coliseo de La Urbina. Al parecer, lo mandó a construir el ex presidente Luis Herrera para que se convirtiera en la gallera más grande del planeta. Fue bombardeado durante el intento golpista del 27 de noviembre de 1992 y sirve principalmente como sede de Polisucre, con sus calabazos y presos que de vez en cuando se fugan o amotinan.

10) Moteles

Los más famosos son los de la Panamericana, pero la vía hacia Guarenas también tiene lo suyo, con notables exponentes como el Hotel Mediterráneo.

11) Electricidad… por ahora

Aunque pocos lo recuerden hoy, Petare fue el primer lugar de Caracas que tuvo suministro eléctrico. Ocurrió el 8 de agosto de 1897 gracias a Ricardo Zuloaga Tovar (1867-1932), fundador de La Electricidad de Caracas y antepasado de María Corina. La primera central hidroeléctrica de Latinoamérica, la planta de El Encantado, aprovechaba el sector más abrupto del río Guaire. Sí: como las baterías humanas de la saga The Matrix, alguna vez el Guaire generó algo eléctrico.