Sebin interroga a rectora de Universidad de Carabobo por supuestos planes subversivos

Divo de Romero leyó en un comunicado, en rueda de prensa desde su despacho, que el interrogatorio se produjo por supuestamente vincularla con un plan subversivo y desestabilizador que intentaría derrocar al presidente Nicolás Maduro y asesinar al gobernador Rafael Lacava y a su familia.
“Tengo 39 años haciendo vida universitaria, tiempo durante el cual me he dedicado por entero a la docencia y a la política universitaria, llegando a ocupar los cargos de Secretaria, luego de Vicerrectora Académica y ahora el de Rectora, en ejercicio de los cuales no he escatimado esfuerzos para lograr el reconocimiento y respeto de la institución y de sus integrantes (…) Me he manifestado en contra de diferentes actuaciones y políticas del gobierno que atentan con los principios que informan el estado de derecho y las garantías democráticas establecidas en nuestra Constitución y leyes vigentes”, dijo.

Explicó que el gobernador Lacava la acusa de participar, junto a un grupo de militares y civiles, en una conspiración y promoviendo un golpe de estado para tumbar al gobierno. “Se ha dedicado a humillarme y a mancillar públicamente mi nombre, honor y dignidad como mujer (…)”, señaló.
La rectora Divo de Romero informó que solicitará una audiencia con el director nacional del Sebin para aclarar la situación y a la vez ratificará que ni la UC ni ella les han negado el apoyo a los organismos gubernamentales a fin de que investiguen lo que requieran.
También anunció que acudirá ante la Presidencia de la República para que se diseñen estrategias para el flagelo de la inseguridad.

-Parte de la controversia-

Desde hace algunas semanas atrás se ha producido un choque en redes sociales, especialmente entre el gobernador Lacava y el secretario de la UC, Pablo Aure.
Más recientemente el mandatario regional dijo que habrían descubierto las pruebas que mostraban que el presidente de la Federación de Centros Universitarios (FCU) de la UC, Iván Uzcátegui, estaba involucrado en el “bachaqueo” de alimentos que desde la gobernación enviaban para el comedor estudiantil de la institución. Esta versión fue negada por Uzcátegui.
Las desavenencias se han ido agudizando y a la par, las autoridades de la UC han solicitado a los organismos de seguridad del estado que reactiven el convenio de vigilancia en áreas de esa casa de estudios sin que se vulnere la autonomía.
En este sentido, no han avanzado mucho debido a que los responsables de este patrullaje han pedido que se realizara una nueva consulta a la comunidad de la UC sobre si aceptaban o no estas acciones de seguridad en el campus de Bárbula en Naguanagua.
El argumento que han expresado es que los estudiantes que respaldaron este iniciativa en 2011 o 2012, ya no son los mismos que hacen vida en la UC en 2018. Una nueva consulta acaba de ser realizada.
En medio de esta circunstancia, dos estudiantes resultaron heridos hace una semana cuando esperaban el transporte a las afueras de la UC.
Varias protestas se han efectuado en la casa de educación superior para denunciar robo de cables, aires acondicionados y equipos que se requieren para el proceso de formación en las siete facultades de la mencionada universidad.
La compleja situación de inseguridad ha tenido siempre en la mira a los responsables de estas políticas públicas para contener el auge delictivo, pero no es sencillo frenar los robos y atracos, según han explicado autoridades en diversos momentos, porque el campus, que es abierto, tiene en sus bordes a 14 comunidades e invasiones y además existen 11 instituciones gubernamentales como hospitales y centros educativos en la misma zona.]]>