Las grietas opositoras parecieran hacerse más profundas al tiempo que, paradójicamente, se habla de la necesidad de fortalecer la unidad. El debate sobre la posible presencia de José Luis Rodríguez Zapatero en un eventual diálogo y un acuerdo que habla de una eventual transición política y de declarar inconstitucional que Nicolás Maduro asuma el poder el próximo 10 de enero, fueron las gotas que rebasaron el vaso de los partidos minoritarios dentro del Parlamento.
Uno de ellos, La Causa R, que cuenta con cuatro diputados. Desde ahora, se declaran como una “fracción propia y responsable de sus actos”. Es decir, no votarán necesariamente en bloque de todo lo que se proponga en el seno del Poder Legislativo.
“No estamos para hacer bulto sino para hacer política”, señala Mariela Magallanes mientras que su compañero Américo de Grazia es más contundente:”No queremos formar parte de ese saco de gatos”.
Para el parlamentario, el acuerdo suscrito el 13 de noviembre por la mayoría de partidos dentro de la Asamblea sólo es una “carta de buenas intenciones”, que a su juicio no reúne lo que verdaderamente aspira la sociedad. Y va más allá. Para él no queda claro a quién beneficia realmente ese acuerdo. O sí. “Solo a los partidos que menciona el acuerdo”. Se refiere a Acción Democrática, Primero Justicia, Voluntad Popular y Un Nuevo Tiempo: El llamado “G4”.
Y es que el documento sólo menciona a estos partidos cómo ilegalizalos junto a la MUD. De Grazia recuerda que la Causa R también está inhabilitada para participar en cualquier proceso electoral y que sus dirigentes han sido amenazados por el propio Nicolás Maduro.
Aunque pudiera pensarse que se trata de un asunto de “egos”, de Grazia argumenta que la decisión que toman así como la de salvar el voto el martes es porque el acuerdo aún y cuando lo describen como algo “político” esgrime razones económicas en su mayoría y deja por fuera temas esenciales para ellos como las sanciones.
“No puede haber negociación sin presión. Y ésta tiene que ser una presión interna. No se puede enfriar la calle. Tampoco puede haber una negociación buena con un negociador malo”, en referencia a quien se ha convertido en un punto de honor: Zapatero.
Otro argumento esgrimido por los representantes de este partido es que aseguran que conocieron este documento “horas antes” de ser debatido. Aclarando que fue en la mañana del martes. Algo que por cierto, ha sido una “práctica” parlamentaria habitual tanto del oficialismo como ahora de la oposición.
Américo de Grazia cuestiona que mientras ellos fueron “madrugados” con el acuerdo, éste tenía cinco semanas discutiéndose. “No nos toman en cuenta para discutir algo tan importante como el futuro del país pero sí quieren nuestro voto”, dice. Sin embargo, Mariela Magallanes reconoce que ha asistido a las reuniones interpartidistas.
El descontento de la Causa R es de viaja data. Incluso, desde que se designaron las Comisiones para el periodo parlamentario 2018-2019, ese partido mostró su inconformidad con la manera cómo fueron distribuidas. Ellos critican que la unidad sea utilizada como una forma de “chantaje”.
En cuanto al acuerdo de gobernabilidad suscrito sostienen que no lo objetarán, así como manifiestan que seguirán participando en iniciativas unitarias como el Frente Amplio y el Congreso del próximo 23 de noviembre para el cual ya están inscritos. También descartan sumarse a la Fracción 16 de julio.
Por otro lado, reconocen que sí queda en “estado crítico” la alianza que mantenían con PJ y VP. Así, pareciera que efectivamente las formas están pesando más que el fondo que une a los opositores.
-Solicitarán medidas cautelares-
La Causa R acudirá a instancias internacionales y solicitarán medidas cautelares de protección para Andrés Velásquez y su familia. El partido denuncia la persecución por parte de organismos de seguridad del Estado contra el dirigente y su familia. Específicamente su hija de 10 años, que aseguran ha sido perseguida hasta su colegio.
Esto a raíz de las denuncias que tanto Velásquez como De Grazia han hecho en torno a la presencia de grupos irregulares como el ELN.
De Grazia señaló que Alexander Gracco Hernández, implicado en la masacre del grupo de Óscar Pérez, “es a quien se le dio la orden de neutralizarnos a Andrés y a mi. Por eso, hacemos responsables al gobierno”.
El diputado no solo reafirma sus denuncias sino que agrega que cuatro mil waraos han sido desplazados hacia Brasil. También reconocen que “la mayoría” de los oficiales de la Fuerza Armada estarían luchando contra la presencia de estos grupos irregulares en el país.
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