Una encuesta de la firma Delphos parece confirmar los peores miedos de algunos opositores: al venezolano promedio ya no le importa quien mejore la economía con tal de que alguien lo haga, para resolver los problemas de las familias, las personas y de todo el país.
Un detallado estudio de opinión de la firma Delphos parece muy propicio para intentar descifrar a la Venezuela de hoy y los pragmáticos intereses de la mayoría: la gente está más preocupada y ocupada en resolver sus problemas económicos y anhelan que el país se una de nuevo.
No les importa tanto si quien resuelve es un chavista o un antichavista, hoy quieren que las cosas mejoren, con o sin un cambio de régimen.
El principal problema del país y en lo personal y familiar son en su conjunto los aspectos relacionados con la economía.
La impresión de este sentir colectivo llega justo en medio de un fuerte frenazo de la economía que parece pulverizar los incipientes avances alcanzados entre 2021 y 2022.
Solo el 22% de los venezolanos dice percibir la situación como positiva y la mayoría de ellos se autodefinen como chavistas. Eso incluye la percepción de Buena (4,3%) y Regular hacia buena (17,6%).
El 78% del total ve la cosa como negativa, lo que incluye 25,9% que la encuentra Pésima, 33% como Mala y 17,8% como «Regular hacia mala«.
La acera de los optimistas es dominada por los minoritarios chavistas maduristas, donde el 78% de ellos tiene una valoración positiva de la situación.
Para resolver esos problemas la mejor salida son los cambios radicales, según la opinión predominante. Pero mientras más cerca del chavismo duro está el grupo de personas, más favorecen esa posición.
De cualquier modo, en el promedio total de los consultados el 65% favorece los cambios radicales, contra 29,1% a favor de los graduales.
Pero, cambios radicales no significa necesariamente salir del gobierno chavista.
Los chavistas maduristas en un 35% quieren esa gradualidad; en lo que coinciden con el 81% del opositor crítico y el 71% de los que no se identifican con nadie.
«Si bien la mayoría de los auto identificados como chavistas señalan a los empresarios y a las sanciones como responsables del bajo poder adquisitivo, es de resaltar que el 10,9 % del chavismo madurista y un tercio (34,9 %) de los No maduristas señalaron al gobierno», expone el estudio con fecha de febrero.
«La cuarta parte de la población evalúa la gestión de Maduro de manera positiva 25,5 % (la mitad de ellos lo hace por la vía del “Regular hacia buena”. La mayoría de los que perciben la gestión positiva se autoidentifican como chavistas.
Otro aprendizaje: en promedio la oposición tiene una valoración peor que la de Maduro.
«La quinta parte de la población evalúa el trabajo de la oposición de manera positiva 19,6 % (la mayoría de ellos lo hace por la vía del “Regular hacia buena”).
En todos los espectros de la población retratada en esta encuesta, en este momento, la característica «Capacidad de unir al país» destaca con fuerza como la más importante.
Para quien tenga memoria y recuerde los derroteros de los últimos años en este conflicto entre el chavismo y el resto de Venezuela podría ser sorprendente que la vasta mayoría se incline por la unión de todos, chavistas y opositores.
Inclusive entre los opositores más duros esa opción tiene más peso (36,6%) que la de «Denunciar y enjuiciar a la élite chavista» (27,4%).
En promedio la mitad del país está a favor de esa unión.
¿Han cambiado las cosas tan profundamente? ¿El Venezolano promedio prefiere pasar la página de esta historia de conflictos, un borrón y cuenta nueva?
La pregunta es imperativa ante Félix Seijas, estadístico, director de Delphos, profesor de la Universidad Central de Venezuela y reconocido analista de entorno.
«No es tanto pasar la pagina y olvidarse de lo anterior. Siempre la gente va a querer que haya respuesta hacia atropellos que ellos piensan que ocurrieron. Pero en realidad por encima de todo está lo vital y en este momento la gente siente que esas necesidadesvitales están ahí: comer, agua, salud…para el grueso de las personas es importante, no para los radicales», dice Seijas en comentarios para esta nota de El Estímulo.
«La gran mayoría de la gente en todos los estudios coincide en que quieren que algo suceda, algo que les alivie sus penurias y recuperar su normalidad».
Félix Seijas, director de Delphos
–En todo este rompecabezas destaca el hecho de que los políticos opositores nunca en estos más de 20 años de hegemonía chavista han cultivado o expresado un discurso sólido para desnudar el fracaso del chavismo desde el lado de la economía. No lo han hecho ni en tiempos de vacas gordas ni en los vacas flacas… «Es la Economía estúpido»…es tan obvio que no se dan ni cuenta…
«Las penurias son de diferentes niveles. Por su puesto hay gente que no está comiendo, hay gente a la que los temas de salud la está agobiando…la intranquilidad deno poder darle a los hijos un educación normal, o salirun día y que los muchachos paseen», responde Seijas sobre esa cotidianidad, esa normalidad tan deseada por la vasta mayoría de los venezolanos, según las encuestas.
«Lo que la gente entendía como su normalidad está interrumpido y quieren recuperarlo. Sienten que el conflicto lo que ha hecho es agravar eso…o agravar la posibilidad deuna salida al propio conflicto, o la paz. La gente prefiere la paz avanzando, sin lugar a dudas», agrega.
«El conflicto lo ha habido y la gente sabe que termina cansada, herida, muerta, presa, y más bien retrocediendo en todo. Pero eso no se puede confundir con que la gente sienta que hay queolvidarlo todo y ya. Son dos cosas distintas».
Félix Seijas
Explica que para el grueso de los venezolanos, sobre todo para las clases bajas, que es esa mayoría, «el conflicto es sinónimo deperdida de bienestar».
«Para ellos cuando hay conflicto y se están peleando los políticos, se estánpeleando por sus propios intereses y no por los intereses de todos. Ahí es cuando ellos favorecen dar un paso hacia adelante, tratar de quelos conflictos bajen, que todos se pongan de acuerdo. Esa es una expresión muy encontrada en los estudios cualitativos: ‘que todos se pongan de acuerdo’. Y entonces las ganas de reencuentro existen, por su puesto«, agrega el experto en estudios de opinión pública.
«La gente quisiera salir de lo que considera una pesadilla y ese es un deseo que está asociado aque ese encuentro también trae prosperidad y recuperación de lo que la gente siente que perdió, de su normalidad».
Félix Seijas, estadístico
Pero, una cosa es lo que la gente desea y otra es lo posible, destaca Seijas.
«Creo que una partemoderada de la oposición está tomando más peso en contraposición con una líder como María Corina Machado. Pero la mayoría está mása favor de escuchar posiciones moderadas y esa tiene que encontrarse en algún momento, coincidircon el chavismo moderado», dice.
Observa que tanto el chavismo como la oposición están conformados por bloques muy diversos. Ninguno de los dos frentes son monolíticos, aunque ambos intenten mostrarse como un bloque único.
«Pero noes así. Dentro hay muchos grupos y hay grupos moderados que en este momento tienen mucho peso en las relaciones de poder. Pero paramí, en estemomento el chavismo no esderrotable desde afuera. El chavismo va a caer desde adentro….desde afuera hay que propiciar esas condiciones, pero que caiga desde afuera esmuy difícil», argumenta.
Mientras no se dé este escenario, el costo de salida del gobierno esinfinito «y ellos irán pagando todoslos costos que haya que pagar», porque siempre serán más bajos que los de esa salida del poder.
Como aquél eslogan de la campaña electoral de Bill Clinton que se volvió un recordatorio de lo obvio pero ignorado, el tema económico parece fuera del radar de los principales opositores e incluso de los propios chavistas en el poder, mientras el venezolano común sigue acumulando penurias sin fin.
Estudios como los de Delphos le ponen números a las necesidades imperiosas de los venezolanos y al sueño de alcanzar una normalidad, no importa de donde ésta venga.
«Si, el tema económico…. «Es la economía estúpido», lo he repetido en varias presentaciones porque eso está a la vista», dice Seijas sobre la necesidad que tienen las fuerzas opositoras de modificar su discurso.
«Un discurso que se ha basado en que ellos (los chavistas) son malos, son corruptos y hay que cambiarlos: «Maduro vete ya», pero sin ofrecer algo más. Y la gente lo que quiere es quele pintesuna Venezuela alternativa. Lo principal es eso, el tema económico», agrega Seijas.
«Que la mayoría quiere un cambio de gobierno, ¡Sí! Pero la gran mayoría de esa mayoría quiere un cambio de gobierno porque siente y percibe que la única manera de que su situación económica cambie es que haya un cambio de gobierno. Solo por eso».
Félix Seijas
La manifestación de esos venezolanos o esa posición no arranca desde querer un cambio de gobierno, añade en una explicación retórica y esclarecedora.
«Arranca en que yo quiero que cambie mi vida y recuperar mi normalidad y termino pensando que la única manera de que eso ocurra escon un cambio de gobierno, entonces quiero el cambio de gobierno. Es decir, si mañana la normalidad vuelve a esa gran mayoría de los hogaresde Venezuela y esa normalidad la da el mismo chavismo, olvídense…ninguno de ellos va a mover un dedo porque esto cambie».
«No es el cambio, es la recuperación de la normalidad…y eso pasa por supuesto por el tema económico. ¿Con el chavismo es muy difícil?, claro que es muy difícil que la persona recupere esa normalidad. Pero si la oposición quiere profundizar esa fractura a lo interno del chavismo tiene que ofrecer una Venezuela distinta».
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