El rock del Papa y los acordes del Señor

El papa Francisco suma sonrisas a su paso. Desde su impacto en Twitter, pasando por su humildad, hasta llegar al disco de rock progresivo que se publicará con sus palabras en próximo 12 de noviembre. Wake Up! será un álbum de 11 temas originales compuestos por Don Giulio Neroni y Tony Pagliuca, integrantes de la banda italiana Le Orme, formada en 1966 y que alcanzó éxitos considerables en su país en los años 70, pináculo del género del rock progresivo en Europa. Sobre la música, se oirán extractos de grabaciones de “Pancho”.

La web especializada Consequence of Sound asoma que el viaje del papa Francisco a Estados Unidos pudiera servir, además de para oficiar una misa masiva en el Madison Square Garden canonizar a un nuevo santo y comer pollo frito, para aprovechar de promocionar ese disco por venir, cuyo primer sencillo se titula “Wake Up! Go! Go! Forward!” y ya acumula casi 110 mil reproducciones en apenas dos días.

Con música, el Papa buscará voltear las tendencias de opinión entre conservadores de Estados Unidos, que lo ubican como reformista y hasta cercano al marxismo, por sus críticas a la «obsesión» de la Iglesia Católica con el aborto y los gays, su condena al «capitalismo salvaje» y a la «dictadura de la economía», y también por su señalamiento sobre la responsabilidad del hombre en el cambio climático.

El candidato presidencial republicano Jeb Bush, de fé católica, dijo que «espero que el cura de mi parroquia no me castigue por decir esto, pero no tomo mis políticas económicas de mis obispos, cardenales o de mi Papa». Su competidor por la nominación Rick Santorum, devoto católico, llegó a asegurar que «a veces es difícil escuchar» al papa Francisco por algunas de sus declaraciones, como en las que dijo que «ser un buen católico no implica tener hijos como conejos». El satirista Greg Gutfeld afirmó que Francisco «no quiere ser un Papa abuelo. Quiere ser un Papa moderno. Le faltan unas rastas y un perro con un pañuelo para unirse al movimiento Occupy Wall Street (Ocupa Wall Street)”, mientras que Michael McKenna, un asesor republicano citado por el diario New York Times, que se describe a sí mismo como un «conservador católico», dijo que el pontífice está «vendiendo una línea de socialismo de estilo latinoamericano» y que Bergoglio «no está en sintonía con la iglesia católica de EEUU». Pero una reciente encuesta del centro de estudios Pew, afirma que un 86% de los católicos de Estados Unidos tiene una visión positiva del Papa.

“Los creyentes, que recen por mí. Los no creyentes, que deseen que me vaya bien”, la frase la pronunció el papa Francisco en Nueva York, durante su visita a Estados Unidos esta semana, una que ha roto varios esquemas al convertirlo en el primer pontífice de la Iglesia Católica en dar un discurso en el Congreso de ese país. También habló en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York. Ambos foros, con buena parte de sus integrantes de religiones ajenas a la de San Pedro.

Francisco, el argentino, el primer papa latinoamericano, se ha venido ganando una fama de modernizador de la Iglesia desde que asumió las riendas del Vaticano. Hincha confeso del fútbol, acostumbrado a manejar por Roma y hasta clientes de tienditas de esquina en la capital italiana, Bergoglio ya es calificado como un “Papa pop”, o un “Papa rockstar”. Ello, aunque la iglesia sigue sin permitir que mujeres encabecen liturgias, y no han cambiado las consideraciones formales ante el aborto, el uso de anticonceptivos, ni tomado cartas en el asunto de los obispos acusados de abusos sexuales contra menores, a pesar de los duros discursos del Santo Padre al respecto.

En todo caso, si el disco progresivo del líder de la iglesia católica pega en el mercado, pudiera darse un resurgir de la música asociada a la religión, aunque estéticamente diferente al movimiento que protagonizó Enigma, el proyecto alemán creado por Michael Cretu, David Fairstein y Frank Peterson en 1990 que terminó publicando siete discos de estudio.