Nuevos insultos del presidente Nicolás Maduro contra dirigentes del partido Voluntad Popular, de Leopoldo López,y la orden de que las autoridades actúen contra la organización "terrorista" que forma parte de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) han puesto en riesgo el incipiente diálogo iniciado el domingo por intermediación de El Vaticano, dijeron dirigentes.
«La agresión de Maduro contra @FreddyGuevaraC y VP es CONTRA TODA LA UNIDAD y en consecuencia constituye una patada contra la Mesa de Diálogo», escribió en su cuenta de Twitter Jesús Chúo Torrealba, secretario ejecutivo de la coalición.
En la noche del martes, durante su programa semanal Contacto con Maduro -que supuestamente venía en todo conciliatorio de paz y amor- el presidente lanzó nuevos improperios contra Voluntad Popular, cuyos dirigentes han dicho que no aceptan sentarse en la mesa de diálogo hasta tanto estén dadas las condiciones reales para una negociación.
«La inmunidad no te salvará de un carcelazo. Pido actuar contra Voluntad Popular porque es un grupo terrorista», dijo Maduro ante los micrófonos al diputado Guevara.
Este partido, uno de los más activo e importantes en la coalición, ratificó minutos después de estas nuevas amenazas que no aceptará sentarse a dialogar en las condiciones actuales.
«Maduro no podrá dividir la oposición entre «dialogantes» y «radicales»: AQUÍ TODOS SOMOS DEMOCRATAS! Solidarios con @FreddyGuevaraC y VP!»escribió Torrealba, uno de los dirigentes más criticados por los algunos opositores radicales por haber iniciado las conversaciones con el gobierno por internediación de la Santa Sede.
«Al agredir a @FreddyGuevaraC y al partido Voluntad Popular, Maduro agrede a la Mesa de Diálogo y se burla de la palabra de @Pontifex_es», agregó el dirigente.
Este martes, cuando se suspendieron las acciones que habían sido iniciadas por la Asamblea y la MUD, y fue diferida hasta el 12 de noviembre la activación del juicio político a Nicolás Maduro y la declaración de su abandono del cargo hasta, el partido manifestó su desacuerdo pero se acogió a lo que decidió la mayoría.
«Voluntad Popular hará todo lo que tenga que hacer para que cumplamos el nuevo compromiso asumido en la Unidad: si para el 12 de noviembre Nicolás Maduro no ha vuelto al carril de la Constitución y nuestro pueblo sigue sin una nueva elección para cambiar al presidente, debemos declarar el abandono del cargo y movilizarnos a Miraflores», dijo el partido en un comunicado.
«Es necesario insistir en la generación de condiciones necesarias que permitan defender la Constitución, la pisoteada democracia y el derecho a todos los venezolanos a elegir libremente para impulsar el cambio que la inmensa mayoría clama como se respira en las calles y lo reflejan todos los sondeos de opinión», dijo a la vez que respaldaba una agenda de Unidad Nacional «que presione al régimen a respetar la voluntad de millones de venezolanos».
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