Miles de enfermeras, entre activas y jubiladas, inician a partir de este lunes una huelga indefinida en hospitales públicos de la capital, movimiento que se extendió a otros estados, para exigir mejores condiciones salariales, cuyos salarios pueden llegar un dólar al mes, en algunos casos.
El personal de enfermería de varios centros asistenciales de la capital como Magallanes de Catia, Universitario de Caracas, Algodonal, Lídice, Pérez Carreño, Periférico de Catia y JM de los Ríos tienen previsto manifestar para exigir mejores salarios e insumos médicos.
Con pancartas en mano, enfermeras de los Magallanes de Catia dijeron a El Estímulo que solo prestarán servicios de emergencia. El personal obrero de la institución se unirá a la huelga.
Desde la Maternidad Santa Ana, en la capital, su unió el diputado y candidato a la gobernación del estado Vargas, José Manuel Olivares, quien defendió al gremio, el cual contabiliza hasta 25.000 solo en Caracas.
Ana Rosario Contreras, presidente del Colegio de Enfermeras de Caracas, explicó una entrevista transmitida por el Circuito Éxitos, que los hospitales en el país se encuentran casi en cierre técnico debido a la falta de personal. “Tenemos hospitales en estados con cierres técnicos como el Hospital Central de San Cristóbal, donde 42% de la plantilla se ha ido”, dijo.
En Mérida, enfermeros del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes también se sumaron a la medida anunciada el viernes en la capital. Este era uno de los estados que Contreras mencionó el viernes, cuando informó sobre el paro.
Además de este, Táchira y Lara estaban entre las entidades que meditaban sumarse a la acción.
En Aragua también hubo acción de calle. Desde el Hospital Central de Maracay, trabajadores del sector estuvieron presente en la jornada de protestas para exigir mejoras salariales.
En total, según Contreras, fueron más de 14 estados los que decidieron acatar dicha medida.
El sindicato de enfermería Satse reitera en Halloween su pedido a las grandes empresas del comercio electrónico y grandes almacenes que no vendan disfraces que siguen recurriendo a la imagen «sexista y estereotipada» de las mujeres enfermeras.
El gremio de la salud es uno de los más golpeados, sobre todo los que trabajan en la primera línea. El presidente de la Federación Médica Venezolana, Douglas León Natera advierte que la cifra de muertos entre médicos y otros trabajadores sanitarios es alarmante.
En Venezuela los trabajadores de la salud que combaten la pandemia de covid-19 están desprotegidos en vida y después de la muerte. A la falta de quipos de protección, comida, abrigo y transporte se suma la certidumbre de saber que si caen enfermos no tendrán atención. Y si mueren, ni siquiera tendrán un hueco donde enterrarlos, o un horno donde su cadáver pueda ser cremado. Esta es la historia de una enfermera víctima de la negligencia más allá de la muerte.
