Armando Scannone cumple 94 años y está atento a todo. Está actualizado en las noticias, sobre lo que sucede a su alrededor, es decir, está lúcido. Cuando se le pregunta qué opina sobre la situación de Venezuela, solo atina a responder con una palabra: “indignado”
“Antes de decidir si una sobra va a la basura, debemos pensar si nos podría servir para la preparación de algún plato”, Leonor Gordils y Michelle Lazzari. Estas líneas preludian lo que a continuación se despliega: buena mesa a partir de restos
“Ponche suave, sabroso, dulce y cremoso”, reza la descripción perfecta de la que se sirvió la publicidad, y el béisbol, para promocionar la bebida soberana de la mesa decembrina criolla
Guido Gobino, uno de los chocolatiers más famosos de Italia, durante su intervención en el evento Passione Cioccolato celebrado en Turín, Italia hace poco, expresó su preocupación por la situación política y económica de Venezuela así como las consecuencias que esto puede tener sobre la calidad y venta de nuestro cacao en el mercado internacional
Adobamos las carnes para darles gusto. Una práctica tan popular en Venezuela que a la mezcla de condimentos para ejecutar la acción la bautizamos “adobo”
“La pelota”, como se refiere popularmente al béisbol en Venezuela, siempre ha sido un deporte de masas. Con entradas relativamente económicas disponibles, cerveza fría a bajo costo y balas frías de todos los tipos es un espectáculo que permite disfrutarse in situ con diversión garantizada, pierda o gane el equipo que se apoye
Masa suave y gomosa presentada en forma de caracol, saturada de papelón con dos tipos de queso y anís. Se muestra como una de las piezas de bollería criolla mejor logradas. Las pistas sobre recetas precedentes son abundantes, pero como sucede con nuestro acervo culinario, los antecedentes desaparecen hasta convertirlas en propias. Sin lugar a dudas, el golfeado es más venezolano que el tricolor nacional
Conocer la ciudad a través de sus sabores es una tendencia que ha tomado fuerza inusitada en años recientes. Tal vez aquel adagio de “dime qué comes y te diré quién eres” jamás había sido tan propicio. Una ruta gastronómica puede hacerse de muchas maneras: no hay lugar pequeño o insignificante. Todos los sitios que posiblemente formarán parte de una travesía culinaria tienen elementos en común: sabor, historias, gente, productos y placer
“Hay cacao procesado correcta e incorrectamente, pero el mejor cacao del mundo no existe”, sostiene el chocolatier italiano Silvio Bessone, quien está de visita en Venezuela invitado por la procesadora KKO Real, para el entrenamiento de los jueces del próximo concurso nacional que organiza anualmente esta empresa y quien cocinará hoy a cuatro manos con el chef Carlos García del restaurante Alto, un menú hecho completamente a base de cacao
Monarca del desayuno criollo, se compone por una fórmula simple y poderosa de huevo, tomate y cebolla. Presente en todas las mesas venezolanas sin importar clase social
En pleno pueblo de Chacao, una barquilla gigante blanca, roja y verde señala el punto exacto de la Heladería de la Nonna, donde dos heladeros día tras día engolosinan a sus clientes
Más de cuarenta años lleva la pescadería Paterdama funcionando en manos de la familia Giambanco, en plena avenida Presidente Medina. La historia comenzó con Vincenzo. Montó el negocio y años después se trajo al país a su hermano Franco, que en ese momento estaba residenciado en Suiza, con la promesa de que sería su propio jefe. Entonces, corre año 1971. Franco tocó suelo criollo con su esposa y tres hijos
Oficio olvidado o, en el mejor de los casos, desconocido por muchos. Ser barista es una novedad para todos, menos para Paramaconi Acosta, real esclavo del café. Su trabajo colando los olorosos granos impregna de ilusión a quienes toman un sorbo de su preparado
Basta con observar la barra de cualquier panadería entre las 7 y las 10 de la mañana, para apreciar quién manda en el desayuno. De masa suave, cubierta ligeramente crujiente y dulce, relleno generoso que ha evolucionado de sobrantes de jamón hasta queso tipo paisa o crema, de forma recta y entorchada, se trata del famoso y tan popular “cachito”Su gusto está por encima de la moda y el boom gastronómico. A nadie le interesa su procedencia o qué clase social lo consume más, si hay un plato venezolano además de las arepas y las empanadas que se consume a diario por su sabor y bajo costo, sin importar el nivel económico, de educación o credo religioso. Simplemente, es sabroso, a todos les gusta y se puede adquirir desde los lugares más humildes hasta las pastelerías más finas y encumbradas.
Un nombre único para un plato del que abundan las versiones en las más diversas geografías. Y un aluvión de ingredientes que le confieren el gusto típico del venezolano, que le va poniendo o quitando según la región donde lo consume (y el grado de carácter aventurero que se ostente). El pasticho es, sin duda, la primera comida que viene a la mente de quien tiene que cocinar y refrigerar para comer muchas veces
Hebras almibaradas de destellos dorados brillan a trasluz, evocando una imagen celestial que le da su nombre. El dulce de cabello de ángel no es un protagonista de la mesa navideña criolla, pero forma parte de ella, esos brillos angelicales se ven opacados por el dulce de lechosa y la torta negraSin embargo, cuando se pregunta de manera informal sobre los platillos típicos de la mesa decembrina criolla, siempre se mencionará su nombre. Se hace a partir de un tipo de auyama, zapallo o calabaza confitera, que consiste en un “vegetal de color blanco cuyo interior se presenta en forma de madeja enredada”(1), que raya casi en lo desabrido al punto que necesita de la presencia de la piña y el azúcar para obtener el sabor.
Para el resto del planeta se trata de lasaña, pero sólo en Venezuela se le dice pasticho. Platillo que al tocar costas criollas sufrió cambio de nombre, adaptándose al gusto local sin perder su esencia. Se trata del manjar italo-venezolano por excelencia