Desde que te sientas en la mesa y hasta que terminas de comer hay ciertas reglas de etiqueta que debes cumplir. Más allá de la formalidad, cada movimiento o posición de la vajilla tiene un por qué. Conoce las normas básicas del protocolo y asegúrate de no cometer errores a la hora de comer
1. Si le falta sal a tu comida, no la agregues con los dedos
2. Los codos no van sobre la mesa, solo se debe apoyar el antebrazo.
3. Si parte del menú es una porción de carne, debes cortarla en la medida que vas comiendo y no toda de una sola vez
4. Si los alimentos están muy calientes, lo ideal es esperar a que tengan una temperatura adecuada y no recurrir a soplar cada bocado antes de llevarlo a la boca.
5. No tomes agua mientras tengas comida en la boca y al sorber evita hacer ruidos al igual que cuando se toma desde el pitillo.
– Después de tomar una sopa, no retires el cubierto. La cuchara debe dejarse dentro del plato.
Si sirves agua desde una jarra evita el contacto con el vaso.
– No lleves el cuchillo a la boca y en caso de usar un palillo, hazlo cuando te hayas retirado de la mesa.
– Cuando tomes té o café agarra la taza con la mano completa
– Las servilletas de tela no se usan en forma de babero, debe ir sobre las piernas.
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Dicen que cada quien es reflejo de las costumbres de su casa. La ropa limpia, la manera de hablar y la forma de comer son aspectos que indican y reflejan los hábitos del hogar.
A lo largo de la historia de la gastronomía, el servicio ha sido engalanado con una serie de implementos y prácticas que buscan un objetivo: generar la atención del comensal a toda costa. En esta entrega de dos partes haré un recorrido por la historia del arte de presentar los alimentos, desde creaciones realmente estrambóticas dignas del reinado de Luis XV hasta la tenedencia minimalista de la cocina molecular
