El gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, se refirió al tema del difícil abastecimiento de productos en el país y la proliferación de revendedores informales, mejor conocidos como "bachaqueros", que a su juicio, aprovechan la poca elaboración de alimentos y adquirir la disminuida oferta de rubros en los mercados nacionales.
Desde Guatire, Capriles considera que el problema actual en Venezuela no tiene que ver con la distribución, sino con la producción. «Si usted llega a un mercado y el anaquel está full, ¿quién revende? (…) Antes había más dinero, había dólares. Se robaban una parte, pero había productos», pero aseguró que en la actualidad no existen los recursos económicos suficientes para poder estimular el proceso de importaciones.
«Ojalá no le metan mano a la Polar. Si le meten mano a la Polar, la gente no va a comer arepa. Ni siquiera va a haber arepa. La única harina de maíz precocida que se consigue es la que hace Polar. No se consigue ninguna de las empresas que expropió el Gobierno. Lo que se ve en los ‘shows’ que monta el Gobierno es la harina que hace Polar. Usted no ve las otras harinas del Gobierno (…) Los venezolanos no dejaremos que eso ocurra. No es un problema del dueño de Polar con el Gobierno. Eso es un patrimonio de los venezolanos».
A juicio de Henrique Capriles, el incremento en el ticket de alimentación, el cual fue de Bs. 42.480 y que será efectivo a partir del primero de diciembre, «ya se evaporó». Hizo referencia al estudio que mensualmente publica el Centro de Documentación y Análisis Para los Trabajadores, Cenda, el cual señala que entre junio y julio, la canasta básica aumentó en Bs. 45.000.
«Ese ajuste es una burla», puntualizó y explicó que es necesario controlarla inflación «que es el el cáncer que se come el poder adquisitivo». Agregó que el ajuste «aislado» realizado por el Gobierno, no resuelve el problema.
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