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5 razones para ver "Los anillos de poder"

La producción más cara de la historia del streaming, la serie “Los anillos de poder” llega a Amazon Prime Video con la promesa de cambiar el mundo de la fantasía en la cultura pop. ¿Lo logra? Con una envergadura difícil de igualar, pero más ambición que solidez narrativa, su éxito todavía es una incógnita 

"los anillos de poder"
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Hace menos de diez años, la posibilidad de que una serie adaptara el complejo, profundo y extenso universo de J.R.R. Tolkien parecía una idea descabellada. O en el mejor de los casos, una que requería un considerable nivel de inversión, trabajo y músculo creativo. Además, claro, de la labor titánica de lidiar con la compleja herencia legal del escritor, la feroz vigilancia de su hijo y albacea Christopher Tolkien y de un grupo de fanáticos acérrimos con un conocimiento enciclopédico de la obra.

Como si eso no fuera suficiente, la posible producción también tenía que lidiar con el legado de la exitosa trilogía cinematográfica de Peter Jackson, que adaptó los tres principales libros de la obra de Tolkien. La llamada saga del Anillo Único es una de las más exitosas de la historia, también de las más premiadas y cosechó alabanzas en todos los ámbitos posibles. Jackson dedicó más de una década a la planeación de un proyecto que retrató con cuidado un universo querido y narró una historia destinada a conmover a generaciones.

Jeff Bezos decidió que podía lograr lo imposible. En otras palabras, lidiar con todo lo anterior y batallar, con considerables los recursos a su disposición, para recrear el mundo de Tolkien desde una perspectiva nueva. Una que, además, incluyera la posibilidad de ampliar el legado y crear una perspectiva original sobre la saga literaria. Para entonces, Christopher Tolkien había muerto y las negociaciones con sus herederos fueron mucho menos duras de lo que cabría suponer.

Lo demás ya se sabe, una inversión de un billón de dólares y la primera obra ambientada que no adapta ninguna historia en específico del mundo Tolkien. Un riesgo que preocupó y desconcertó a los fanáticos, pero que Jeff Bezos y su equipo decidieron llevar a cabo con lo que el mismo millonario llamó “un esfuerzo monumental”. El resultado es una producción que desde ya se considera de las más asombrosas en la televisión y el streaming. Y que con sus libertades creativas, logró la proeza de reproducir, con una exactitud meticulosa, el universo descrito por Tolkien.

Te damos cinco razones para dar la oportunidad a “Los anillos de poder”, con la advertencia de que es posible que se convierta en tu nueva obsesión.  

1) Es una versión del universo de Tolkien que te sorprenderá de todas las formas posibles 

“Los anillos de poder” de Amazon Prime, deja claro de inmediato que el mundo que mostrará es por completo nuevo. Las primeras grandes secuencias de la serie, que recorren la Tierra Media en toda su plenitud, deslumbran con la belleza de paisajes reales y el uso de todo tipo de recursos visuales. También, se relaciona de la habilidad con que el argumento utiliza sus primeras imágenes para sugerir algo específico: hay un mundo nuevo por recorrer. Uno, que supera en imaginación y detalles, al construido por Peter Jackson en su ya clásica trilogía.

Lo hace gracias a la forma en que el programa retrata el imaginario de J.R.R. Tolkien desde un punto de vista conmovedor. Con toda la intención de emocionar a los fanáticos, la Tierra Media de los showrunners Patrick McKay y J.D. Payne, es mucho más ajustada a las descripciones de los textos originales y fue pensada para apartarse por completo de la visión naturalista de Jackson.

En esta ocasión, el argumento acentúa la necesidad de narrar a través de la realidad física de la célebre obra en la que se basa. De edificar ciudades con una arquitectura que propone su existencia en un plano y tiempo por completo distinto. Varios de los escenarios más emblemáticos de la mitología de Tolkien, emergen de las páginas desde su toda su majestuosa belleza. Prime Video -con recursos tecnológicos y financieros considerables- sostiene un mundo nuevo a todos los extremos y en cada posibilidad que la historia que cuenta ofrece.

2) No se parece a nada que hayas visto hasta ahora 

Peter Jackson utilizó paisajes atemporales para crear una geografía que, hasta entonces, únicamente se describió en los clásicos libros. También, recreó lo mejor que pudo y con la tecnología a su disposición, los parajes emblemáticos de la Tercera Edad, una época en la que seres humanos y todo tipo de razas fantásticas tenían una estrecha y singular relación. Logró un paisaje extraordinario, pero que se sostuvo sobre tomas al aire libre y la reconstrucción de fragmentos de algo más amplio.

“Los anillos de poder”hace justo lo contrario y se adentra en la Tierra Media como espacio realista y reconocible. No recurre al truco de montañas o valles verdes que pudiera desconcertar por su belleza. Construye lo descrito por Tolkien punto a punto. Al mismo tiempo, retrocede miles de años atrás  -y esto queda claro de inmediato- por lo que el ámbito visual y estético cambia. Un riesgo que evita la comparación con la obra previa.

La dirección de J. A. Bayona (que está al frente de los dos primeros capítulos) hace énfasis en ese hecho. La reproducción de la obra de Tolkien es completa y cuidadosa, en lo esencial, un concepto visual novedoso que se desmarca de paralelismos. La serie de Prime Video tiene poca relación con la trilogía cinematográfica y la diferencia se marca en cómo recrear la mitología conocida en pequeños detalles. Lo hace desde los cielos amplios, de un azul añil purísimo, hasta el cúmulo de estrellas radiantes de una noche de aspecto primitivo. Las Montañas Nubladas y bosques élficos se recorren con el sentido de un territorio no tocado por el hombre. Incluso el Reino de Númenor, ya mostrado en la pantalla grande, tiene un aspecto renovado y poderoso.

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3) Cuenta algo nuevo en el universo de Tolkien 

“Los anillos de poder” no es una obra adaptada, es una aventura ambientada en la Tierra Media. Quizás, por eso, la primera mirada a Galadriel (Morfydd Clark) sea la de su dolor. Algo inédito hasta ahora en el personaje.

La versión encarnada por Cate Blanchett en la obra de Jackson se encontraba en una plenitud reposada. Pero ahora es joven y no solamente en apariencia. A la vez, muestra un impulso desesperado y casi humano de hacer justicia, el afán por cumplir con un voto sagrado que incluye enfrentarse al mal absoluto.

Como en el poema “La balada de Leithian”, la elfa perdió a su hermano Finrod Felagund (Will Fletcher). Por lo que al solo mostrar el duelo de Galadriel, el argumento logra contar un hecho mayor que marcará la serie en adelante. Se trató de un acontecimiento trascendental en el que el guerrero se enfrentó a Sauron y perdió. El guion analiza lo ocurrido desde el punto de vista de Galadriel y la responsabilidad que toma como propia. La lucha contra la oscuridad no ha terminado y de hecho, la caída del héroe anuncia que el peligro es más cercano que nunca.

4) “Los anillos de poder”: una nueva dimensión de Tolkien

El guion toma entonces las primeras grandes salvedades sobre la obra de Tolkien. Galadriel se encuentra a una considerable distancia de la criatura descrita en los libros. El sufrimiento la hirió de “manera total”, según sus palabras, y la dejó a merced de una angustia contenida que se expresa en pequeños gestos.

Mientras honra la memoria del hermano muerto, toma una decisión. La gesta contra las penumbras del mundo no quedará incompleta. Desde el primer capítulo, la serie deja claro que el argumento tomará el mismo sentido del deber irrevocable que “El señor de los anillos”.

Para eso, la elfa necesitará compañeros y romper la natural desconfianza entre las razas de la Tierra Media. Al mismo tiempo, debe comprender cuál es su lugar en un mundo que cambia bajo su mirada y la convierte en protagonista circunstancial de un evento mayor.

5) «Otra» Galadriel, más emociones y detalles

Galadriel es un nombre familiar para los fanáticos de Tolkien. Pero lo que es por completo nuevo es su afán de aventura, justicia y capacidad de liderazgo: la elfa es la cabeza visible de una resistencia contra el mal que la aleja de los bosques.

La motivan valores que la vinculan al sentido de su responsabilidad con el mundo que asumió como suyo. Esta heroína en armadura que conoce de cerca el rostro del miedo, está muy lejos de la criatura contemplativa del mundo literario. El primer gran cambio en la serie.

Pero no es el único. Una de las peculiaridades de la producción es puntualizar el impulso de las emociones. Lo que aleja al argumento del sentido simbólico dado por Tolkien a la mayoría de sus personajes.

La producción demuestra, una y otra vez, hasta qué punto el equipo artístico de la serie intentó plasmar la antropología de la Tierra Media. Desde atuendos, joyas, muebles, casas, calles y armas hasta los largos planos que muestran a un mundo joven y sin duda, más frágil. La serie está consciente de que engloba mitos propios, leyendas que se vinculan al guion y lo hace con más cuidado de lo esperado.

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