Cine y TV

"I Came By": final explicado y analizamos la posibilidad de una secuela

La película de Netflix tiene un final que deja desconcertados a los usuarios del servicio de streaming. Sin embargo, en la cinta van dejando pistas que aquí sacamos a la luz para que comprendas este cierre

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Desde que se estrenó el 31 de agosto, «I Came By» no ha pasado inadvertida. El final de la película, y algunos detalles sobre ciertos personajes que habitan los cuartos de «pánico» del juez jubilado Héctor Blake (Hugh Bonneville), han generado muchas especulaciones.

Los fanáticos de Netflix quieren saber si sus conclusiones son las adecuadas. Y aunque cada obra puede tener una significado diferente para cada persona, en este caso hay muchas pistas que nos dejan muy claro por qué Blake hace lo que hace y cuál es el final de algunos de los personajes. Eso lo vamos a detallar en las siguientes líneas.

¿Quién es el primer secuestrado?

La historia de «I Came By» comienza con dos asaltantes. Rápidamente sabemos que no quieren robar, sino que defienden los derechos de los animales y en general, la agenda progresista. Toby Nealy (George MacKay) y Jamel ‘Jay’ Agassi (Percelle Ascott) se encargan de dejar un mensaje a manera de «justicia» en las paredes: «Pasaba por aquí» (la traducción del título de la película).

Sin embargo, al poco tiempo solo Toby continúa con la misión debido a que Jay debe hacerse cargo del embarazo de su novia y no desea dar alguna excusa a las autoridades para que lo detengan. Es en este momento que todo cambia radicalmente. El joven invasor llega a la casa del juez y encuentra algo más que un recinto burgués: Héctor guarda fotos de un joven torturado. Peor aún, descubre que que en esta residencia está la víctima.

Luego de que la policía no se toma la denuncia con seriedad, Toby decide tomar cartas en el asunto. Parece que está a punto de liberar al secuestrado, pero resbala y termina convirtiéndose en otra víctima de Héctor. Pero esta situación nos obliga a hacernos dos preguntas. La primera: ¿quién es el retenido en el cuarto del pánico? La segunda: ¿realmente murió Toby?

Las respuestas a las anteriores preguntas estás en el relato de Héctor a otra víctima, el masajista Omid (Yazdan Qafouri). El juez cuenta que su padre, a quien vemos regularmente en un inmenso retrato, invitó a un emigrante «parsi», llamado Ravi, a la casa. Con el tiempo, progenitor e invitado se volvieron íntimos sexualmente. Como consecuencia de ello, Héctor fue enviado a un internado y su madre se suicidó.

Ese extraño cuadro, en el que la figura paternal terminó unido con otro hombre y luego desató la tragedia del suicidio, activó mucha rabia en Héctor, quien decidió vengarse y en algún momento golpeó «brutalmente» a Ravi hasta llevarlo casi a la muerte. Desde entonces, el villano de la cinta se convirtió en un torturador. Una paradoja porque para la opinión pública era un defensor de los migrantes.

Los parsis o parsis son un grupo etnorreligioso del subcontinente indio. Entonces, hay un patrón: Héctor busca emigrantes con ciertas características con la idea de revivir la excitación que le produjo haber molido a golpes al amante de su padre. «Fue tan liberador, tan empoderador. Casi trascendental», dijo el juez a Ravi. Es por eso que el primer retenido se parece mucho al último que libera Jay. Y también es la razón porque tarde o temprano, Omid también cae en desgracia, aunque logró salvarse en el primer intento.

De todas maneras, si tienes dudas, el coguionista y director de «I Came By», el iraní Babak Anvari, le confesó a Digital Spy que los secuestrados son todos diferentes. Eso elimina la posibilidad de que el primero y el último sean los mismos.

¿Qué pasó con Toby?

Como se ve, Toby falla en el intento de rescate; resbala y es golpeado con el palo de cricket. Aquí es cuando entra en acción la madre de él, Lizzie (Kelly Macdonald). Ella intuye que algo pasó y, como en un juego del gato y el ratón, termina también en el mismo sótano en el que Héctor descuartiza a Omid. El psicópata le confiesa a la mujer que se deshizo del cuerpo de Toby y esto tiene sentido porque en una escena se ve al juez incinerando el bate y una ropa que le pertenecía al grafitero.

En dos platos: Toby fue asesinado e incinerado y, eventualmente, Lizzie también corrió con la misma suerte. Esto activa al último personaje que sabía lo que podía estar pasando, Jay.

Tras atar cabos al ver que Lizzie desapareció y que Héctor se mudó, consigue la nueva dirección del asesino y allí, tras una breve pelea, consigue que el juez confiese lo sucedido. Sin embargo, en la habitación para torturar no están ni Lizzie ni Toby, sino una nueva víctima, a la que libera.

Jay regresa con su ex novia Naz (Varada Sethu), quien era la que tenía la nueva dirección de Héctor (porque estaba leyendo su tesis), sumido en el dolor. No ha podido salvar a sus seres queridos y el remordimiento recorre su cuerpo.

¿Habrá una secuela?

La película parece cerrada, pero el juez Héctor Blake luce como un villano muy aprovechable al estilo de Stephen Lang (El Ciego) de «No respires» o uno de los grandes villanos de las películas serie B: «El padrastro». Después de todo, hay muchas cosas que la película no cuenta gráficamente, por ejemplo, todo el episodio de Ravi. O, ¿cuántas son las víctimas de este juez? Es poco probable que un hombre con este trauma solo haya torturado a un puñado de personas.

También podríamos ver en una continuación el futuro de Jay, quien había renunciado a su carácter de justiciero social por tomar el rol de padre. O incluso, sabiendo los contactos que tiene por su carrera, ¿quién puede asegurar que Héctor va a cumplir completamente su condena? Obviamente son especulaciones. La palabra final la tendrá la aceptación de la película y lo que diga el algoritmo de Netflix.

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