Economía

Economía después del 6D, según la banca de inversión

La pregunta para las firmas internacionales no es si la oposición o el chavismo ganarán las elecciones, sino cuál escenario brindaría la mayor posibilidad de un cambio en el modelo económico.

Publicidad

Para Bank of America, el país ya está preparado para un posible ajuste. En un informe divulgado a mediados del mes pasado, el economista de la firma para la Región Andina, Francisco Rodríguez, escribió que la prolongada escasez, la contracción económica y la aceleración inflacionaria ha tenido impacto en el apoyo de la estrategia de controles aplicada durante todo el gobierno de Nicolás Maduro.

“Los votantes parecen estar más dispuestos a apoyar un ajuste económico de lo que se creería”, señaló, basándose en los resultados de una encuesta al respecto encargada a la firma Datanálisis.

En este sentido, considera que las elecciones del 6 de diciembre abren una puerta a los funcionarios más “pragmáticos” dentro del propio gobierno para aplicar correcciones en materia económica. No obstante, la firma advirtió en otro reporte más reciente que los cambios en política económica probablemente vendrán de modificaciones en la dinámica interna y no del equipo económico actual, “que parece concentrado en manejar la liquidez externa usando las fuentes disponibles de recursos”.

Barclays plantea escenarios específicos en los que una posible victoria de la oposición podría rebalancear los poderes públicos y promover o influenciar cambios en política económica. Por ejemplo, con una mayoría simple la oposición tendría el poder para aprobar leyes ordinarias, incluyendo el presupuesto de la nación, y darle el visto bueno a los créditos adicionales solicitados por el Ejecutivo, los cuales se han convertido en una especie de presupuesto paralelo.

Con una mayoría calificada (tres quintos del parlamento), la tendencia victoriosa podría generar cambios en el gabinete ejecutivo. Y con dos tercios de los curules, el ganador sería aún más poderoso: podría aprobar leyes orgánicas, reformas constitucionales o, incluso, convocar a una Asamblea Constituyente.

El efecto de los resultados dependerá, sin embargo, de cómo las partes reaccionen frente a ellos y, además, no garantice que se actúe en pro de atender el tema económico. “Si la oposición gana las elecciones parlamentarias, el gobierno podría estar tan débil que no sería capaz de tomar medidas para aliviar la fuerte crisis económica y esto podría seguir minando su nivel de apoyo en la población y las instituciones”, señala un reporte enviado por la firma fechado el 1 de diciembre.

Pero mientras Barclays y Bank of America hablan de transición y de oportunidades de cambio, otras firmas son menos optimistas al sentenciar que, pase lo que pase, no esperan cambios positivos en materia económica.

Para Morgan Stanley, el resultado más probable es el de una mayoría simple y cerrada para la oposición. Los analistas de la firma consideran que, en términos económicos, el año 2016 será más complicado que 2015, debido a la continuidad de la caída de los precios del petróleo y un menor margen para contraer las importaciones.

Además, se inclinan hacia la posibilidad de que el gobierno implemente algunos paliativos económicos para evitar el malestar social, pero estos no constituirán un cambio de modelo. Ante la situación, calculan que un evento crediticio –default– podría materializarse durante el último trimestre de 2016.

Por su parte, Credit Suisse advierte en un informe divulgado el 30 de noviembre que si la oposición gana por un amplio margen (dos tercios de la AN), podría darle elmomentum que necesita para impulsar un cambio político, “aunque carece de una agenda política clara y sus esfuerzos podrían verse frustrados por otras instituciones dominadas por el chavismo”.

La firma no está convencida de que una mayoría simple de la oposición desencadenaría cambios significativos en el país. “Muchos de los poderes asociados con la mayoría simple podrían ser frustrados por los poderes Ejecutivo y Judicial, desde nuestra perspectiva”, detalla el texto.

Esto en cuanto a lo político. Sobre lo económico, Credit Suisse no prevé ajustes en ninguno de los escenarios relacionados con los resultados electorales.“Modificaciones sustanciales son improbables en un clima de mayor confrontación política (…). Aún más, tanto el chavismo como la oposición podrían mostrarse reacios a asumir la responsabilidad de la aplicación de medidas impopulares (…). En consecuencia, todavía vemos un riesgo significativo de un evento crediticio el cuarto trimestre de 2016″, indicó.

Publicidad
Publicidad