Economía

Pedro Palma: el país sufre una depresión económica con inflación galopante

El economista Pedro Palma, uno de los más respetados de Venezuela, advirtió que el ya “gravísimo” cuadro de la economía venezolana se está complicando peligrosamente con una profunda depresión económica e inflación galopante, ante la mirada irresoluta del gobierno de Nicolás Maduro, que no termina de reconocer el problema ni mucho menos de enfrentarlo.

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“He estado muy preocupado con respecto al futuro inmediato de Venezuela, porque las cosas que se están haciendo, que están pasando en política económica, apuntan a una dirección contraria a lo que debería hacerse para afrontar y solventar los graves problemas fiscales, monetarios, cambiarios, petroleros”, dijo Palma en entrevista.

“Eso a lo que va a llevar es el agravamiento y materialización de una crisis muy profunda que estoy viendo y que se está ya materializando. Puede empeorar en el futuro inmediato. Eso es algo que a mi realmente me preocupa y me angustia”, dijo Palma, ex presidente de la Academia Nacional de Ciencias Económicas y Sociales y profesor del IESA (Instituto de Estudios Superiores de Administración).

Palma repasa los grandes problemas de la economía venezolana: un déficit fiscal enorme (que equivale a unos 18 puntos del Producto Interno Bruto, o unos $80.000 millones) la tasa de inflación más alta del mundo (sobre 100% este año) una explosiva impresión de dinero sin respaldo y el financiamiento del Banco Central de Venezuela por un monto que supera los Bs 675.000 millones en 2014 a Pdvsa.

“En materia inflacionaria por ejemplo, estamos haciendo las cosas diametralmente opuestas: lejos de ir a una disciplina fiscal estamos incurriendo en los déficits más profundos en nuestra historia, estamos poniendo al BCV a financiar ese gasto público deficitario con dinero inorgánico expandiendo la oferta monetaria de una forma desmedida”, señaló Palma.

En 2014, la inflación oficial fue de 68,5%, pero “la subyacente” , si la limpias de factores distorsionantes, estás hablando de una tasa superior a 80%.

“Y para este año estamos previendo desde varios meses atrás, en 2014, que estábamos de 110 a 120%. Y ya nos estamos quedando cortos, puede ser sustancialmente mayor a ese nivel”, dijo.

Si definimos la hiperinflación como un alza totalmente desproporcionada con el resto de los países sí podríamos estar hablando que una inflación de tres dígitos podría definirse como una hiperinflación. Pero no  quiero caer en esos tecnicismos, vamos a hablar de inflación galopante y definitivamente eso es lo que tenemos en Venezuela”, dijo el economista.

“Hemos caído en un situación realmente crítica en un callejón sin salida. Porque no hay la posibilidad de producir más. Eso está generando una paralización de la actividad productiva que se traduce en una recesión económica muy importante”, dijo.

Hay una  “restricción total en las posibilidades de producción, la inversión está paralizada, no hay acceso a las divisas para importar los productos, lo que ha generado un endeudamiento de los productores, importadores y comerciantes», dijo.

“Hay deudas enormes acumuladas y esos proveedores no siguen despachando”, piden que empiecen por pagar la deuda previamente y esos son los dólares que no existen, explicó.

El año pasado la recesión económica fue de 4% y este año estamos esperando una caída mayor. Cada vez las cosas se están complicando más. El mismo FMI está hablando de un 7% este año. “No te extrañe que sea de una depresión económica tremenda, combinada con una inflación fuera de control”, advirtió.

El también director de la firma Ecoanalítica señaló que mientras tanto, no se está estimulando la inversión productiva, se está hostigando a la actividad económica privada, hay un sector productivo en manos del sector publico totalmente ineficiente, ausencia de divisas para poder importar y poder realizar las actividades económicas normales.

“En fin, estamos haciendo todo lo diametralmente opuesto a lo que debemos hacer para enfrentar los problemas de la economía. Eso es algo que me preocupa tremendamente”, dijo.

Palma señala que el recrudecimiento de la conflictividad del gobierno de Nicolás Maduro con Estados Unidos introduce nuevas cargas a este cuadro y dificulta la búsqueda de soluciones.

Dijo estar preocupado “con toda esta ideología y esta falta de toma de decisiones, con esta indecisión pasmante del gobierno, que pasa el tiempo y pasan los años… y no se toma conciencia de la dimensión de los problemas que están ahí y están creciendo y aumentando en una forma importante”.

“Es como si tuviéramos un cáncer dentro del organismo, de la economía y ese cáncer va aumentando y simplemente el gobierno lo ignora y lo ignora y que eso no existe”, advierte.

“Las consecuencias van a ser realmente dramáticas porque al agravarse los problemas, las correcciones y soluciones son cada vez más dolorosas, más traumáticas y a eso es a lo que vamos a someter a la población venezolana”, lamentó.

“Las principales víctimas van a ser las de ese segmento de más bajos ingresos que es precisamente la que le ha dado el mayor apoyo al gobierno”, advirtió.

Lamentó esa política, esa  “farsa sin fundamentos” acerca de un imperio que nos está amenazando militarmente y nos va a invadir, “son cosas sin ningún fundamento, pero es un discurso para una masa de población que quiere creer, tener aspiraciones de que mejoren sus condiciones de vida, pero lo están llevando es al empeoramiento de sus condiciones de vida».

Palma, que es socio de la Cámara Venezolano Americana de Comercio e Industria (VenAmcham), señaló que Estados Unidos “siempre ha sido un gran aliado”, principal proveedor y principal mercado para Venezuela.

“No tiene sentido esta confrontación absurda en que hemos caído, con estas acusaciones sin fundamento, de esta verborrea ideológica que no tiene sentido alguno sino a lo mejor convencer a un segmento de la población que tiende a aglutinar un apoyo por del gobierno”, dijo.

A la empresas de EEUU obviamente se les ha complicado tremendamente sus operaciones en Venezuela, no tienen acceso a divisas, mantiene una deuda tremenda acumulada con sus casas matrices, no ha podido retornar dividendos de años anteriores; no han podido incrementar sus precios de años anteriores y no han tenido con qué reponer esas materias primas e insumos.

Algunas de estas empresas están postergando decisiones de inversión o revisando la posibilidad de lanzar nuevos productos por estos problemas que están teniendo que enfrentar.

“También es cierto que tienen muy claro que ya están en Venezuela y cometerían un gravísimo error cerrando sus puertas y yéndose porque van a perder unas oportunidades tremendas una vez que este país dé el brinco”, dijo apostando a que habrá una rápida recuperación más temprano que tarde, una vez que se cambie de orientación y el país se enrumbe “por el camino correcto” y se haga una realidad ese potencial que tiene Venezuela de avanzar en un desarrollo sustentable con visión a largo plazo”.

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