Economía

El ministro Carlos Osorio prometió hace dos meses que hoy se acababa la escasez

En una entrevista concedida a José Vicente Rangel el 7 de junio, el titular de Alimentación aseguró que “en uno o dos meses deberíamos tener estabilizados los productos que no se encuentran en los anaqueles”. En sesenta días, aquellas palabras quedaron tan devaluadas como el bolívar.

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Foto: AP

Hoy, 7 de agosto de 2015, se celebra el Día del No abastecimiento. Quizás sin darse cuenta, el ministro de Alimentación, Carlos Osorio, creó esta particular efeméride. Hace exactamente dos meses, Osorio juró que este viernes sería una fecha muy especial.

“En uno o dos meses deberíamos tener estabilizados los productos que no se encuentran en los anaqueles”, aseveró el vicepresidente de Seguridad y Soberanía Alimentaria el pasado 7 de junio, en una entrevista concedida al periodista y exvicepresidente de la República, José Vicente Rangel, en su programa José Vicente Hoy.

Aquel domingo, el general Osorio le dijo a Rangel que en esta primera etapa – que culminaba este viernes- garantizarían “en su totalidad los productos de primera necesidad” para, posteriormente, ir “estabilizando cada uno de los sectores”.

¿Por qué la promesa del titular de Alimentación cayó en el vacío de los anaqueles? “La escasez es inherente al modelo. Mientras el Ejecutivo siga con la política de controles – de cambio y de precios – la escasez, los mercados negros, el contrabando y el bachaqueo estarán presentes”, responde el economista Asdrúbal Oliveros, director de la firma Ecoanalítica, quien advierte que este cuadro tiende a empeorar por “la fuerte caída de los ingresos petroleros”.

“Si bien el Gobierno central dejó de publicar el indicador de escasez – para evitar que se usara como ‘herramienta política’- las colas y los anaqueles vacíos son clara señal de que el problema se ha agudizado”, sostiene la economista Anabella Abadi.

La experta apunta que para enfrentar la crisis, Miraflores anunció que incrementaría las compras públicas en el exterior, al tiempo que el presidente Nicolás Maduro recientemente solicitó elaborar un plan para la sustitución de importaciones.

“Le di una orden a Marco Torres (ministro de Finanzas) y quiero que la ejecutemos pronto para que conformemos una comisión de trabajo, de carácter presidencial, del más alto nivel científico y tecnológico, que tenga como pivotes fundamentales a Pdvsa, a Sidor, a la industria del aluminio, a la Cantv, y a los principales centros científicos del país, para ir a la definición de un plan de acción para impactar sobre la guerra económica e ir a un proceso profundo de sustitución de importaciones a todo nivel de la economía”, declaró Maduro el primero de agosto.

Sin embargo, a juicio de Abadi, la propuesta presidencial naufragará en el mar de restricciones impuestas por el socialismo del siglo XXI. “El problema de fondo es el modelo económico, que genera trabas para la producción local. Se deben eliminar las distorsiones generadas por los controles y políticas de intervención al sector privado, para comenzar a recuperar el aparato productivo nacional y, de esa manera, poder llenar los anaqueles de manera oportuna y suficiente”, concluye.

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