Cerca de fin de año y sin que el Banco Central de Venezuela haya dado a conocer los indicadores macroeconómicos de 2016, distintas instituciones y bancas de inversión comienzan a dar a conocer sus estimaciones para cierre de año, sin que se prevea cambios en la política económica.
Con el fuerte ajuste externo que el gobierno aplicó producto del desplome de los precios del petróleo y de la caída de su producción, que lleva este año el nivel de importaciones a $30.000 millones, el déficit en cuenta corriente será de $6.000 millones, de acuerdo a proyecciones de Torino Capital.
En su más reciente informe semanal, la banca de inversión sostiene que el gasto público alcanzó su pico en 2012, y que su posterior reducción fue más lenta que la contracción del PIB hasta 29% en términos reales este año. A pesar de la velocidad de este descenso, se estima que el país seguirá teniendo un déficit presupuestario del sector público consolidado aún significativo de 7,5% del PIB en 2016.
Según el reporte, se prevé que la economía se estabilice a una tasa de crecimiento baja, teniendo a las importaciones como el factor fundamental para esta recuperación. Se estima que precios del petróleo un poco más altos que los actuales contribuyan a aliviar la presión externa.
«Nuestro escenario base está lejos de ser uno de una recuperación importante: sólo esperamos que la economía crezca 1,9% en 2017 (de un decrecimiento de -11,2% este año), apenas por encima de la tasa de crecimiento de la población. El PIB per cápita real permanecerá 22% por debajo del máximo de 2012 y 12% por debajo del nivel de 1998».
De acuerdo con la proyección, desde el primer trimestre del año próximo, la economía mostrará rebote con un PIB de 0,6% que va en aumento hasta el cuarto trimestre cuando registra un crecimiento de 2,8%.
Torino Capital también espera que el gasto público continúe en niveles similares a los de 2016, que son muy inferiores a los de 2015. Sin embargo, prevén que el déficit puede reducirse a 4,3% del PIB en 2017 producto de una mayor flexibilidad de precios y algunas reformas fiscales.
La menor necesidad de imprimir dinero inorgánico debería conducir a una desaceleración de la liquidez, ya que la inflación empieza a descender progresivamente. «Sin embargo, vemos que la estabilización de precios se produce solo de forma gradual y, por tanto, esperamos que la inflación alcance 267% en 2017, frente a un 353% estimado en 2016».
De acuerdo con las proyecciones de Torino Capital y reportes de varias organizaciones internacionales y gobiernos, para 2017 se espera un alza de salario mínimo de 304,8% nominal -incluyendo el bono de alimentación-, en contraste con el de este año estimado en 453,8%.
La tasa cambiaria, es otro de los indicadores sobre los cuales la firma hace un estimado, situando la tasa Dicom (flotante) en Bs 700 y la del mercado paralelo en Bs 1.989,7 en promedio al cierre de este año, en tanto que para 2017 calcula en Bs 2.434,8 el Dicom y el paralelo en Bs 4.058,1 al cierre de 2017.
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