Venezuela repetirá el mal desempeño en 2016, año para el cual la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) calcula un retroceso de la economía de 7,0% del Producto Interno Bruto (PIB). Este año, la caída será de 7,1%, la peor de la región.
Los datos de este organismo de la ONU confirman que este país petrolero tiene el peor desempeño de la toda la región y encadenará tres años seguidos en recesión.
El informe difundido hoy precisó en su balance preliminar anual de las economías de la región que la recesión prevista para este año se debe principalmente al complejo escenario externo. América Latina y el Caribe cerrará el 2015 con una caída del producto interno bruto de 0,4 % y crecerá solo 0,2% el próximo año.
La situación en Venezuela (-7,1%) es tan crítica que, junto con Brasil (-3,5%), ayuda a hundir el promedio regional de crecimiento del PIB. Panamá será el país que más crecerá, con 6,2%.
Al igual que en años anteriores, las condiciones externas tienen un efecto muy diferenciado en la región. Mientras América Central crecerá en torno a 4,3% en 2016, América del Sur anotará una contracción de -0,8% en su PIB, explicada principalmente por los retrocesos esperados de Brasil y Venezuela. El Caribe de habla inglesa, en tanto, crecerá 1,6%.
Las estimaciones sobre Venezuela se elaboran en ausencia de datos oficiales. El Banco Central de Venezuela no ha divulgado los resultados del PIB venezolano desde el tercer trimestre de 2014. En ese año, el retroceso del PIB venezolano fue de 4,0%.
Si se divide entre el número de habitantes de Venezuela, este PIB per cápita nacional se estancó en 2013, cayó 5,3% en 2014 y otro 8,3% en 2015. Esto significa que en tres años la creación de riqueza en la economía nacional a repartir entre sus pobladores ha caído 13,6%.
En Venezuela, factores como el menor suministro de divisas para las importaciones, en especial para el sector privado, el aumento de la escasez tanto de bienes finales como de insumos productivos, el financiamiento monetario de la gestión del sector público, junto con una depreciación del tipo de cambio del mercado paralelo superior a 400%, ocasionaron un significativo repunte de la inflación.
En los primeros 10 meses de 2015, las reservas internacionales de América Latina y el Caribe registraron una contracción del 3,8%, la mayor desde el inicio del superciclo de los bienes primarios en 2003, para ubicarse en $15.045 millones, contra $22.081 millones en 2014.
Venezuela es la economía con mayores pérdidas de reservas internacionales, con -31,8%, y sus cifras son las más bajas desde 2003.
Según el informe de la Cepal, la región deberá enfrentar en 2016 diversos escenarios y riesgos de la economía mundial, que sin duda condicionarán su desempeño económico.
En el frente externo, se prevé que el crecimiento global se mantenga lento y llegue a 2,9%, mientras que persiste la incertidumbre sobre China –uno de los principales socios comerciales de la región- país que continuará desacelerándose hasta 6,4%.
A la incertidumbre sobre la economía mundial se agrega el bajo crecimiento del comercio global (1,5% en 2015 y 2,5% estimado para 2016). Además, los precios de las materias primas que la región exporta se mantendrán bajos, con lo que América Latina y el Caribe volvería a mostrar en 2016 un deterioro en términos de intercambio, especialmente en países exportadores de hidrocarburos y minerales, señala el documento.
En materia financiera, la Cepal explica que el próximo año persistirán la volatilidad y la incertidumbre observadas en 2015, con lo que algunas economías emergentes seguirán teniendo dificultades para obtener recursos en los mercados internacionales. A esto se suma la persistente apreciación del dólar y el aumento de la tasa de interés en Estados Unidos.
Según las proyecciones de la Cepal, Panamá liderará el crecimiento regional el próximo año con una expansión, seguido por Dominica y República Dominicana (5,2%), San Kitts y Nevis (4,7%) y Bolivia (4,5%). Se prevé que Nicaragua crezca 4,3%, mientras que Cuba lo hará en 4,2%, Guatemala 4,0%, Perú 3,4%, Costa Rica y Honduras 3,3%, Colombia y Paraguay 3,0%, México 2,6%, Haití 2,5%, El Salvador 2,4%, Chile 2,1%, Uruguay 1,5%, Argentina 0,8% y Ecuador 0,3%
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