Precios de menú ejecutivo no se mantienen por más de dos semanas

La inflación es el común denominador de la economía. El poder adquisitivo disminuye con el avance de los precios y comprar un menú ejecutivo se ha convertido en un lujo principalmente para los que ganan salario mínimo. El precio más bajo encontrado en un breve recorrido realizado por El Estímulo fue de Bs 1.550, en la panadería Cueva de Iria en Santa Eduvigis, lo que representa tres días de salario mínimo aproximadamente, a razón de 501,7 bolívares el día.

Su encargado, Manuel Viloria, destacó que esta semana ya debe aumentar ese precio porque la carne y el pollo aumentarán: Bs 4.100 y Bs 2.800 el kilo respectivamente, según anunciaron los proveedores.

Las ventas del menú ejecutivo en esta panadería han caído aproximadamente 35% y para hacer frente a esto, Viloria señaló que «tenemos que seguir trabajando con lo que tenemos y aumentar los precios, no nos queda de otra».

Agregó que no tienen arroz, aceite, mantequilla, azúcar y harina de trigo y que le han querido vender estos productos a un precio mucho más alto que el que corresponde. En el establecimiento, el menú es distinto todos los días.

En lo que va de año, los restaurantes se han visto obligados a aumentar el precio del menú todos los meses, como es en el caso de El Orleón Café, en Los Palos Grandes. El gerente asegura que las ventas han bajado al menos 30% porque no se puede mantener un precio fijo por más de dos semanas.

Actualmente ofrecen el menú ejecutivo en Bs 1.850 y, aunque no han dejado de vender algunos alimentos o sustituirlos, sí han tenido que reducir las porciones. Los platos incluyen comida variada como pollo, pabellón, vegetales, ensalada, arroz y puré.

Otros se han visto obligados a vender a pérdida y, aunque se siga aumentado el precio, ya no acude la misma cantidad de gente. Es el caso de El Presidente, también en Los Palos Grandes. Su dueña explicó que «no puedo hablar de precios porque hoy es uno y mañana otro. Resulta que yo fijo el precio para ganarle 30% y a la semana siguiente ya le estoy perdiendo 10%».

El plato cuesta Bs 2.500, es decir, cinco días de salario mínimo, y han dejado de ofrecer principalmente los productos del mar. «Aquí las ventas han caído considerablemente, viene 30% menos gente que antes. Mi única solución a esto es bajar la santamaria y vivir en paz», dijo la encargada.

En los restaurantes de comida por peso ocurre una situación similar: las ventas han caído porque el aumento de precios es incontrolable. En el Arroyo del centro comercial Líder y Tolón, el costo al público del kilo de comida es de Bs 3.000. Su encargada, Norelis Velázquez, asegura que la baja ha sido al menos de 50%.

En Mariess, del centro empresarial Parque Cristal, el precio del kilo de comida es de Bs 1.950.

A los precios del menú ejecutivo o comida por peso hay que sumar el costo del envase para llevar. Puede ir desde 80 bolívares como en el caso de Mariess a Bs 300 en el Orleón Café.

El cestaticket de alimentación, beneficio establecido por ley, que puede entregarse en efectivo o bajo la figura de tarjeta electrónica o tickets a los trabajadores, equivale a 18.585 bolívares mensuales o lo que es lo mismo 619,50 bolívares diarios, que solo cubre un tercio del costo de un almuerzo.

La inflación se ubicó en 180,9% en 2015, de acuerdo al Banco Central de Venezuela, aunque firmas independientes como Datanálisis, la calculan en 240%. Su presidente, Luis Vicente León, estima que el alza de precios de bienes y servicios en los primeros cuatro meses de 2016 fue de 120%.

Los comerciantes no son optimistas respecto al futuro. No creen en cambios positivos, por lo que aseguran que tendrán que seguir subiendo los precios de los almuerzos o cerrar el negocio.