Economía

A Venezuela se le agota el tiempo para el canje de deuda

Analistas sostienen que el gobierno ya tiene resuelto el pago de los bonos que vencen a finales de 2016, pero aún debe conseguir los recursos para los $5.015 millones que debe erogar a comienzos de 2017. El tiempo pasa y no logra alcanzar un acuerdo. Los inversionistas esperan por la operación que puede verse amenazada por la baja del petróleo y los conflictos políticos internos. 

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Foto: Archivo | AP, Michael Milano

Venezuela continúa las conversaciones para lograr un acuerdo de canje de bonos de deuda externa; la posibilidad de caer en default o impago debido a la caída de sus ingresos en divisas ha obligado al gobierno a buscar opciones.

Hasta ahora, los anuncios de funcionarios del gabinete económico hablan de la ejecución de un canje de deuda de los títulos de Pdvsa, pero han tardado en llegar a un convenio. El alto riesgo país de Venezuela que hasta el 3 de agosto se ubicaba en 2.551 puntos (uno de los más altos del mundo), obliga a ofrecer a los tenedores de bonos una muy alta tasa de interés.

Además, el costo de asegurar los bonos venezolanos por riesgo de impago por un año saltó 5,83 puntos en la última semana, lo que significó el incremento en cinco días más alto desde abril, según datos de la agencia Bloomberg. Los cambios en el gabinete ministerial del presidente Nicolás Maduro afectó la percepción del país debido a la incertidumbre sobre la política económica.

Analistas recuerdan que entre las opciones de las que puede echar mano el gobierno es la restructuración, lo cual constituye una operación unilateral por parte del emisor (en este caso Pdvsa) del título. Los nuevos términos, entre ellos el plazo y la tasa de interés del cupón, los establece el emisor sin negociarlo con los tenedores del bono.

Otra posibilidad es el refinanciamiento, en el cual el emisor y el inversionista negocian para llegar a acuerdos, es decir, es un canje voluntario de unos bonos por otros en el cual se ofrece algún tipo de garantía.

Por otra parte,  las autoridades financieras pueden seguir utilizando algunas modalidades para obtener los recursos en divisas necesarios para honrar los compromisos de deuda, entre ellos, recomprar deuda, disminuir las importaciones, acceder a un financiamiento externo y realizar operaciones de swap de oro monetario para darle liquidez a las reservas internacionales. Sin embargo, estas opciones no son inagotables y dependen de la estabilidad de muchas variables.

Aunque el gobierno ha cumplido con todos sus pagos de deuda en detrimento de una menor asignación de divisas para las importaciones, algunos voceros oficiales justifican la necesidad de un refinanciamiento. «¿Por qué Venezuela no puede refinanciar su deuda? Jamás ha dejado de pagar su deuda. No hay razón técnica para decir que es un país riesgoso. No hay nada que haga pensar que no va a pagar su deuda en los próximos años», afirmó recientemente el jefe de la fracción parlamentaria del Psuv en la Asamblea Nacional, Héctor Rodríguez.

– ¿Se agota el tiempo? –

Para el director de Kapital Consultores, Víctor Silva, Venezuela “ha tardado mucho” en llegar a un acuerdo, pero que aún no se le ha agotado el tiempo para ello. “Un elemento que puede estar retrasando en estos momentos el canje es la baja del precio del petróleo, no era lo mismo realizar un canje con una cotización de 50 dólares que plantearlo ahora a 40 dólares”.

La cotización del barril de crudo lleva cinco semanas bajando y para el jueves 4 de agosto la cesta venezolana cerró en $33,55. No obstante, Silva sostiene que los inversionistas están convencidos ya de la factibilidad de la operación.

“Lo están esperando. Hay apetito por los bonos, el incremento en la deuda venezolana, particularmente en la parte larga de la curva ha sido considerable, lo que quiere decir que el mercado está a la espera de la noticia”, sostuvo.

Silva resalta que los inversionistas están claros en que Venezuela tiene un problema de liquidez severo, más no de solvencia y que “cualquier tenedor de bono va a estar bastante cómodo con alcanzar un acuerdo de canje que implique a valor nominal dos bonos por uno de los títulos involucrados en la operación. La voluntad de pago de Venezuela ha sido muy clara y la capacidad dependerá de los precios del petróleo. Pero el tiempo apremia y mientras más avance el cierre de la negociación será mejor”.

El economista Orlando Ochoa señala que la urgencia de contar con los recursos necesarios para honrar la deuda se centra en los bonos que se vencen en los primeros meses del año 2017. Explica que de no llegarse a un acuerdo, las posibilidades que quedan son las de solicitar un financiamiento externo y restringir aún más la entrega de divisas a la importación.

“Venezuela ya tiene resuelto el pago de los bonos que se vencen a finales de 2016, el problema está en las erogaciones que debe enfrentar en febrero, marzo, abril y mayo que suman 5.015 millones de dólares. Aquí es donde está la mayor preocupación”, apuntó Ochoa.   

Señala además que las negociaciones para el canje de bonos también llegan en un momento político complicado para el país. Las posibilidades de cambio en el gobierno ya sea por revocatorio presidencial o renuncia están latentes y eso mantiene en expectativas a los inversionistas.

Ninguno de los políticos está tomando en cuenta el cronograma de pago de la deuda. Cualquier operación de canje o renegociación requiere de meses para alcanzar un acuerdo. No es cierto que un cambio político va a resolver este problema de manera automática”, resalta Orlando Ochoa.

– Los números –

Importantes pagos le quedan a Pdvsa para el segundo semestre del año, mientras que la República debe disponer de un monto significativo de recursos para honrar los intereses por deuda contraída en períodos anteriores.

De acuerdo a las cifras disponibles, Pdvsa debe erogar 3.250 millones de dólares entre finales del mes de octubre y comienzos de noviembre entre capital e intereses por los vencimientos de dos bonos emitidos por la petrolera estatal.

Igualmente debe erogar la suma de $1.021 millones por intereses correspondientes a varios de sus papeles de deuda.

La República –por su parte- debe cancelar $97 millones sólo en intereses de deuda. Ya por los bonos soberanos se pagó $70 millones durante el pasado mes de julio.

En definitiva, el país debe utilizar de sus recursos en divisas la suma de $3.050 millones en capital y $2.663 millones en intereses, para un gran total de $5.713 millones entre agosto y diciembre.

“Entre finales de 2016 y comienzos de 2017, Venezuela debe erogar 10 mil millones de dólares en pagos de deuda. Una cifra realmente significativa. Si un gobierno quiere negociar a un canje en buenos términos tendría que cambiar la política económica para dar señales de rectificación. Y todo parece indicar que no será así, por eso los costos del canje son muy altos”, indicó Ochoa.

Ofrecer garantías en activos a los inversionistas para lograr alcanzar un acuerdo es difícil para una nación, Ochoa explica que en el caso de Venezuela la mayor garantía serían las reservas de petróleo, pero “no es factible”.

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