Los precios han escalado hasta 550% en los últimos 11 meses, en los cuales las empresas embotelladoras han sorteado la escasez de insumos (azúcar, resina plástica y aluminio) y lanzado al mercado presentaciones a base de edulcorantes.
La botella de 1,5 litros, en presentación normal, pasó de Bs 460 a Bs 2.990 (550%), la bombona de 600 ml marcaba Bs 420 en febrero de 2016 y ahora se expende a Bs 1.200, un alza de 185,71%. La lata de 355 ml pasó de Bs 360 a Bs 1.500, una variación de 316,66%.
Este último precio es el equivalente a $0,44, según la tasa de cambio del mercado paralelo.
En el segundo trimestre de 2016 las dos empresas que dominan el mercado (Coca-Cola Femsa y Pepsi-Cola Venezuela) agotaron los inventarios de azúcar, lo que detuvo la producción en el caso de la primera de las compañías. Comenzando el segundo semestre Pepsi Max y Coca-Cola sin calorías emergieron en el mercado para mantener la presencia de sus respectivas marcas en momentos en los que la escasez de azúcar amenazaba con paralizar la elaboración de bebidas carbonatas.
Luego que el gobierno permitiera a empresarios importar materias primas, insumos y productos terminados con dólares propios para aliviar la fuerte escasez que agobia a los venezolanos, la presencia de los refrescos en los anaqueles, en sus distintas presentaciones, comenzó a regularizarse.
Varios fueron los aumentos que registraron los refrescos en 2016, desafiando la capacidad de compra de los consumidores en un contexto altamente inflacionario, en el que la adquisición de bienes básicos es la prioridad de los venezolanos.
Los precios de los refrescos son los que se presentan a continuación:
Con información de Andrea Ballesteros