Considera además que la medida tomada por el Ejecutivo el pasado viernes 5 de enero fue “muy a la ligera”, y en su opinión, debió haber una aproximación diplomática antes de hacer efectiva una decisión de esa naturaleza.
“Las fronteras que tenemos con Aruba, Curazao y Bonaire siempre han sido de muy buena calidad: humana y amiga. Ellos viven de nuestro comercio y nosotros vivimos del de ellos (…) Nos estamos encarcelando a nosotros mismos”, alertó.
Recordó que el mismo presidente Nicolás Maduro había pedido como medida para potenciar el área económica, buscar nuevas formas de producción para generar divisas.
“Las tres islas son generadoras de divisas para el país, pero ahora nos trancó el camino. Si yo, como comerciante, preparo toda una infraestructura para traer divisas al país y me cierran la frontera, significa que voy a incumplir con todos los compromisos comerciales que tengo, con los barcos, con otras empresas, con todo”, señaló.
El experto en actividad marítima y portuaria aseguró que la situación en la frontera se produce porque el Estado venezolano “no hace respetar sus propias leyes” y añade que las aduanas están siendo manejadas “de una forma muy diferente a lo que indica nuestra Constitución”.
“La frontera debe ser estrictamente aduanera (artículo 36 de Ley Orgánica de Aduanas), pero se está trabajando con militares”, explicó.
Opina que responsabilizar al Estado arubeño de la problemática de contrabando en su totalidad es “taparse los ojos”, puesto que, a su juicio, “nosotros somos los principales culpables”.
“Aruba recibe cualquier mercancía que va con factura y no puede conocer si es verídica o no, nuestra frontera es la que debe, por el Seniat y la aduana, garantizar eso. Y no se está cumpliendo porque hay complacencia con gente corrupta… Si vamos a hablar de esto, vamos a atacar el problema desde la raíz y la raíz es la corrupción reinante que hay en Venezuela”.
El comerciante ejemplificó el deficiente funcionamiento de las aduanas con el auge del contrabando de cableado eléctrico de alta tensión, delito que, según denunció, se ha masificado en la región.
“Aquí (Falcón), todos los días nos están robando los cables eléctricos de alta tensión, que no es que lo sacan ningunos muchachos, los sacan camiones de talla grande y gente preparada para sacar los cables. Todas las semanas tenemos apagones porque roban los cables. ¿Quién está robando los cables? ¿Cómo salen de aquí? Estamos hablando de cantidades enormes. De Paraguaná, solamente, salen semanalmente 30 toneladas de cable. En nuestra frontera tenemos patrullaje, tenemos aduana, tenemos guardia costera… ¿Cómo sale? No sé”, alertó.
– Puente aéreo para retornar a venezolanos varados en Aruba –
Un grupo de ciudadanos venezolanos quedó varado en el aeropuerto Internacional Reina Beatrix de Aruba luego de que el vicepresidente ejecutivo, Tareck El Aissami, anunciara vía Twitter, la extensión del cierre de las operaciones aéreas y marítimas, comercial o privadas, con destino a las islas de Aruba, Bonaire y Curazao.
El gobierno de Venezuela anunció que este miércoles se abriría un puente aéreo para que las personas que se encontraban en las Antillas Holandesas y Venezuela puedan retornar a sus respectivos países. La aerolínea privada Albatros habría enviado su aeronave más grande (100 puestos) con destino a Aruba para garantizar el traslado.
Hasta los momentos, la medida de cierre se mantendrá hasta que se realice una reunión de alto nivel entre ambos gobiernos, la cual, según confirmó la primera ministra de Aruba, Evelyn Wever-Croes, tendrá lugar el próximo viernes en la isla caribeña.
Como primera medida para contrarrestar el contrabando, el gobierno arubeño prohibió la compra y venta de cobre que proceda de tierras venezolanas y no esté certificado, para así disminuir la extracción ilegal del mineral desde nuestro país.
El pasado 5 de enero, el presidente de la República, Nicolás Maduro, ordenó la suspensión de todas las comunicaciones con las tres islas por un lapso de 72 horas, a raíz del tráfico de mercancías y contrabando de productos. El mandatario afirmó que si no se corrige la situación está dispuesto a tomar medidas aún “más radicales”.]]>