“Aunque no somos economistas, vivimos la situación y estamos claros que un pasaje mínimo en rutas urbanas y suburbanas debe estar entre 40.000 y 50.000 bolívares. Nos dirán que estamos locos, pero está es la realidad y no le podemos decir mentiras al pueblo”.
La solicitud de aumentar a 5.000 bolívares el pasaje urbano y suburbano, en el estado Táchira, ya quedó desfasada ante los índices hiperinflacionarios en los que ha caído la economía nacional, argumentó el vocero del transporte.
“Con el aumento que exigíamos hace un mes ya no se compra ni una chupeta. Si se quiere mejorar el servicio de transporte urbano y suburbano corto dentro del área metropolitana se debe hacer un incremento considerable del pasaje aunque sabemos que los sueldos de los trabajadores no les alcanza para cubrir gastos de transporte”.
El gremio de transporte público en la región advierte que de no llegarse a un acuerdo que los beneficie, lamentablemente el Táchira se irá quedando sin transporte urbano, el más utilizado por el ciudadano común que cada día sale buscar autobús o camionetica para llegar a los sitios de trabajo a estudiar.
El último aumento en el pasaje urbano (2.500 y 3.000 bolívares), acordado hace un mes entre el sindicato de transporte y la alcaldía del municipio San Cristóbal, no puede mantenerse ante el incremento en los costos de lubricantes, filtros que requieren de un cambio constante para garantizar el normal funcionamiento de la unidad de transporte, dijo Velasco a El Estímulo.
– Precios insostenibles –
El representante del sindicato transporte, Víctor Velasco, precisó que los altos costos de los repuestos e insumos como lubricantes, hacen imposible mantener un pasaje urbano o suburbano al precio actual.
“Entre más días pasan la situación del transporte público empeora. A veces hay que cruzar la frontera porque sale más barato comprar los lubricantes allá que aquí. Un galón de aceite para las busetas más pequeñas, con capacidad para unos 32 pasajeros, se consigue en Bs 20 millones, sin contar filtros que tienen un costo de Bs. 3.000.000, cada uno, mantenimiento que se hace mensual”.
Para el cambio de lubricantes de un autobús Encava con 50 puestos se requiere de Bs 40 millones más el costo del filtro.
Cada cuatro o cinco meses se deben renovar los frenos del transporte público, en lo que se debe invertir Bs 15 millones. Sin embargo, aseguró que cada día los precios aumentan por lo que no se tiene un costo fijo de mantenimiento.
“No podemos estimar un costo fijo de mantenimiento de un carro de transporte público porque el alza en los precios de los repuestos es diario. Los frenos el mes pasado costaban Bs 8 millones, ya esta semana están en Bs 15 millones. Los precios de una correa, reparar la avería de un caucho o cualquier reparación por más pequeña que sea representa una fortuna y no puede hacerse con el costo del pasaje en Bs 2.500”.
– A la espera –
Los transportistas del Táchira esperan por el análisis de costos que estaría aplicando la alcaldía capitalina para fijar un nuevo incremento en los precios del transporte urbano y suburbano, incremento que se estaría vigente para finales de marzo.
Por otra parte, piden que el gobierno nacional, regional y parlamentarios del consejo legislativo se aboquen a buscar soluciones a la crisis que atraviesa el sector, donde el más perjudicado resulta ser el pueblo.
“El gobierno nacional debe garantizarnos lo insumos y repuestos a precios razonables lo que podrá salvar el servicio. Solo entre un 20% y 25% de las unidades de transporte de líneas urbanas y suburbanas se encuentran operativas en San Cristóbal”.
Ni la proveeduría socialista, tan publicitada y bandera de la gestión de gobierno del ex gobernador Vielma Mora, pudo cumplir con el gremio en cuanto a la dotación de insumos y repuestos.
“Le venden a un línea de transporte cinco cauchos cuando tienen una flota de más de 20 unidades, ¿para qué es útil eso? Eso no sirve así, lo que hacen es hacerse publicidad con las necesidades de los transportistas”.]]>