Mariángel Molina, Andrés Solórzano y Norihuska Camacho son tres profesionales venezolanos que consiguieron en medio de la difícil situación que atraviesa el país, una oportunidad de negocio.
Hace poco más de un año decidieron crear Closettine, una plataforma que les permite a los usuarios comprar y vender ropa de segunda mano de forma cómoda, rápida y confiable, a través de un clic.
La idea surgió cuando Norihuska, residenciada en Chile, regresó a Venezuela y les contó a sus amigos sobre la experiencia que tuvo con una página web que trabajaba con ropa usada. A Mariángel y Andrés les llamó la atención el proyecto y decidieron replicarlo en el país, pero con un concepto más amplio, que le aportara más al público venezolano.
Varios meses después, los socios decidieron que la página no solo serviría para comprar y vender ropa usada en buenas condiciones y bajos precios, también sería una plataforma para incentivar el reciclaje de las prendas, con la intención de reducir la cantidad de residuos textiles que a diario van a parar a los basureros del país.
“Las mujeres podemos tener un closet full de ropa y solo usamos 30% de todo lo que tenemos. Closettine te permite darle la oportunidad a las prendas que ya no usas, de sacarlas y dejar que otra usuaria las compre. También te invita a que saques lo que ya está muy desgastado y lo dones, para que otras personas lo usen como materia prima en la elaboración de nuevos productos. La idea es que ese material se pueda emplear incluso para hacer peluches y regalarlos a los niños del Hospital J.M. de los Ríos”, afirma Mariángel.
Recuerda que, a diferencia de décadas anteriores, ahora la comercialización de artículos de segunda mano se ha vuelto más común, pues a las personas se les hace muy difícil reunir altas sumas de dinero para adquirir prendas nuevas.
“Nosotros lo que quisimos hacer fue formalizar un negocio que ya existía. Ahora es muy común ver a las personas comprando y vendiendo ropa de segunda mano a través de sus cuentas personales en redes sociales. Lo que nos planteamos hacer fue una plataforma en la que tanto las vendedoras como las compradoras puedan hacer las transacciones de forma más transparente y segura”, añade Andrés.
Con la idea en mente, los socios comenzaron a levantar el capital para la creación de la página. Empezaron con dinero propio y posteriormente crearon un crowdfunding, donde recibieron apoyo de amigos, familiares y conocidos.
“Uno de los gastos más fuertes es el del desarrollo web, porque no se paga en moneda local. Llegamos a una alianza con Manuel González, un joven de la Universidad Simón Bolívar, al que le gustó tanto el proyecto que decidió asociarse con nosotros. También hicimos una alianza para la creación del logo”, agregó Andrés.
– ¿Cómo funciona? –
La promoción de la página comenzó el miércoles 13 de septiembre, y en menos de una semana ya se habían hecho las primeras transacciones. El paso inicial para comprar y vender en Closettine es registrarse en la página y crear un perfil. Por el momento solo se está comercializando ropa y accesorios para mujeres. Más adelante esperan diversificarse.
Una vez registradas las usuarias o closettinas, pueden empezar a comprar lo que está disponible en la página y a ofrecer lo que tienen en sus closets y que ya no usan.
“En la plataforma hay una serie de recomendaciones para que las closettinas sepan cómo deben ser las fotos a subir para que capten más clientes y además la página conserve una estética armoniosa”, dijo Mariángel.
Los creadores de Closettine no establecen un límite de piezas a subir, ni interfieren en la fijación de los precios, pero sí revisan el material antes de ser publicado y piden que el monto que se cobre esté por debajo del precio de mercado.
“En principio el pago se hará a través de transferencias bancarias. Una vez que confirmemos que se hizo la transacción, le avisamos a la vendedora para que se ponga de acuerdo y entregue el producto. Cuando la cliente manifieste que recibió su compra, liberamos el dinero a la vendedora”, detalló Andrés.
Por este año los creadores de Closettine no obtendrán ganancias por las transacciones, pero a partir de 2018 comenzarán a cobrar una comisión a las usuarias que vendan a través de la plataforma.
– Reconocimiento internacional –
El próximo domingo 1 de octubre los creadores de Closettine presentarán oficialmente la página durante el Retro Mercado, gracias a una alianza con la organizadora del evento. La intención es que posteriormente, ese sea un centro de acopio donde las personas puedan llevar las prendas que ya estén muy viejas, para que sean recicladas.
“Nos hemos estado reuniendo con diferentes emprendedores, que pudieran convertir luego estas piezas en los peluches que se van a donar. Como dice Carlos Brandt, que ha sido nuestro mentor en este proyecto, este no es un momento para jugar solos, tenemos que juntarnos, porque así podemos hacer más. Y en eso estamos”, dijo Andrés.
El aporte social de los creadores de Closettine ya los hizo merecedores de una beca que otorga la Young Leaders of the Americas Initiative (YLAI), un programa patrocinado por el Departamento de Estado de Estados Unidos, promocionado por la embajada estadounidense en Caracas.
En Venezuela se postularon más de 500 emprendedores que están trabajando en proyectos con alguna arista social, de los cuales fueron seleccionados solo 15 que viajarán a Estados Unidos para potenciar sus herramientas de emprendimiento y para enseñar lo que han estado haciendo en el país.
“Venezuela es el tercer país que más emprendedores está llevando. Eso nos hace sentir muy bien, sobre todo por la difícil situación que vivimos”, afirma Mariángel, quien estará más de un mes en Pittsburgh, Pennsylvania dando a conocer el trabajo que están haciendo con Closettine.]]>