De esos 1,2 millones de cuentas, Twitter suspendió 274.000 durante los últimos seis meses del año pasado, lo que supone un descenso del 8,4% respecto al anterior periodo analizado y la segunda vez consecutiva que baja el número de perfiles anulados por ese motivo.
Casi todas las cuentas suspendidas en la última mitad de 2017, 93% fueron identificadas por las propias herramientas internas de la firma y 74% no llegaron a emitir su primer tuit.
La firma radicada en San Francisco (California) pretende mostrar con este tipo de informes sus esfuerzos para combatir el extremismo ‘online’, y aseguró hoy que la promoción del terrorismo «cada vez está más fuera de Twitter» gracias a «años de duro trabajo».
Además, desgranó que las alertas emitidas por gobiernos sobre las violaciones de este tipo en la red social representaron menos del 0,2% de todas las suspensiones en esos seis meses, y esa cifra se ha reducido a la mitad en comparación con el anterior periodo analizado.
Por otra parte, Twitter actualizó un mapa con las solicitudes de eliminación de contenido por cuestiones legales, órdenes judiciales o demandas de otro tipo, que fueron emitidas en esos últimos 6 meses de 2017 por autoridades de países, organizaciones que combaten la discriminación o abogados defensores de individuos.
«Casi 85% del volumen global total se originó solo en dos países: Rusia y Turquía. Turquía sigue siendo la que envía más solicitudes, que suponen aproximadamente 65% del total mundial», apuntó Twitter.
En Turquía, la firma retuvo 148 cuentas y 322 tuits por violaciones de las leyes relacionadas con los derechos personales y la difamación, así como la ley antiterrorista.
Por su parte, en Rusia retuvo 23 cuentas y 630 tuits a petición del Roskomnadzor, el órgano fiscalizador de las comunicaciones, por demandas relativas a una ley que cubre la promoción del suicidio, el extremismo, el juego, las drogas ilegales y la pornografía infantil.]]>