Arrestado en Arizona, al suroeste del país, Keya Morgan comparecerá ante un juez y será enviado a Los Ángeles para ser imputado, según un comunicado de la policía de la ciudad californiana.
Stan Lee que revolucionó la cultura pop cocreando algunos de los superhéroes más célebres como Spider-Man y Pantera Negra, murió en noviembre a los 95 años de edad, tras haber padecido varias enfermedades en los últimos años. La investigación sobre el presunto abuso que le infligió su exrepresentante comenzó en marzo de 2018.
El año pasado, el exabogado de Lee, Tom Lallas, pidió una orden de alejamiento contra Keya Morgan, afirmando que ese hombre de 43 años de edad era un coleccionista de recuerdos que había entrado en la vida del señor Lee como ayudante y lo había aislado de sus allegados.
Lallas acusó a Morgan de explotar a Stan Lee -que, según él, mostraba síntomas de pérdida de memoria a corto plazo y de alteración del juicio- y de intentar apoderarse de su fortuna, calculada en más de 50 millones de dólares.
Además de la orden de alejamiento, la policía de Los Ángeles detuvo a Morgan el año pasado por llamadas falsas al número de emergencia 911, en los que afirmaba que la vida de Lee estaba en peligro.
Según la policía, hizo esas llamadas en junio de 2018 para convencer a Lee de abandonar su residencia del barrio de Hollywood Hills e instalarse en un apartamento de Beverly Hills, donde habría quedado aislado y bajo el control de Morgan.
Los investigadores acusan a Morgan de robo, sobre todo durante firmas de autógrafos en las que Lee ganó 262.000 dólares que jamás llegaron a sus bolsillos.
Tras la orden de alejamiento del año pasado, Morgan declaró al portal de noticias sobre celebridades TMZ que había cuidado muy bien de Stan Lee en los últimos años y que las acusaciones contra él eran falsas.