Las aulas de clase, patios y derredores son campos de violencia. Hay asesinatos, riñas, heridas con puñales. El pavor impide a la mayoría de los maestros denunciar a los jóvenes agresores. Expertos advierten del ascenso acelerado del crimen como mecanismo de orden dentro de la educación venezolana
En 2016 repuntaron delitos que no eran comunes: hurto de comida en escuelas, supermercados y fincas. Los robos a las casas ahora tienen como parada obligada los gabinetes y neveras
Cerramos el año apegados a nuestra controversial línea editorial. El bien y el mal. Pecado y plegaria. Despídete del 2015 con la última y exclusiva sesión de fotos de "Rosita", la vedette de Maracay que saltó de la pantalla chica a las páginas de sucesos de los medios nacionales. Aquí nosotros tampoco juzgamos a nadie
El secretario ejecutivo de la MUD afirmó que para salir de los malandros "que están en la calle", primero hay que salir de los "malandros que están en el gobierno".
Según las declaraciones del criminólogo y profesor universitario Andrés Antillano, son los funcionarios policiales los que venden las armas y balas a los delincuentes que mantienen azotados a los habitantes de los barrios.
Luis Villasmil, funcionario de la Policía Municipal de Baruta, y quien además se desempeñaba como escolta del alcalde Gerardo Blyde, fue asesinado por dos impacto de bala en pierna y cuello tras intento de robo.
Estas son cinco historias de jóvenes que se desdoblan. De día son barberos, mensajeros o colectores de autobús para conseguir dinero extra. Pero de noche sus alter ego amañan crímenes: son vendedores de droga, secuestradores, guardaespaldas de otros delincuentes y ladrones Prefieren cambiar sus nombres por apodos grotescos, risorios y originales para esta ocasión. Ellos son jóvenes de la clase baja venezolana que se dedican al crimen. “Matsui” vende marihuana y cripi. “Lagarto” comete secuestros. “Kun Fu Panda” resguarda las espaldas de “chivos pesados”, o sea: es el guardián de delincuentes de gruesos prontuarios. “Choreto” suele robar en autobuses y “Cara e muerto” es su compañero. Todos trabajan a medio tiempo. De día practican pequeños oficios, de noche encarnan el delito.
No se trata de una condición erótica o de una vírica enfermedad de transmisión sexual. La Cangrejera es una playa en Higuerote que, pese al reguetón, fiesta y mujeres, se quitó el bikini para usar los vestidos de negro luto. Tan peligrosa como hermosa es escenario de secuestros, crímenes y ahogados
En el año 2012 logró incursionar en la vida cotidiana del penal de San Antonio en la Isla de Margarita cuando desarrollaba la obra de su último proyecto artístico. Nacida en Rumania, respingada y perseverante, llamó la atención de los presos quienes la condujeron el encuentro con la suprema autoridad de la cárcel más violenta de Venezuela: alias “El Conejo”
El propio José Vicente Rangel se lo dijo a Leonardo Padrón en Los Imposibles: Chávez estaba renuente a meter ese tema en la agenda porque “no quiere reprimir”.
Las estadísticas resultan una cachetada cuando no un chasquido de fusil: más de 50 policías han caído en manos de la delincuencia armada en lo que va de año. Matan en busca de más armas. De más pólvora y chapas
Este barrio vivió un episodio más de sangre. Como en una película de vaqueros e indios, un escuadrón de policías del Estado se enfrentó a los de hierros impunes de las bandas malhechoras que diezman a la población. Sin pactos ni armisticios, las cabezas criminales, pranes desde sus cárceles, juran no cesar hasta imponer su ley de horror y mortandad
Una de las últimas muertes, que ha causado conmoción en la opinión pública, es la de la funcionaria de la policía del municipio caraqueño de Sucre Polisucre, Osmary Tavare, de 27 años.
En Venezuela existe un auge de asesinos a sueldo. Ya el sicariato no es un delito propio de estados fronterizos ni tampoco de gremios sindicales. Se convirtió en un virus que infecta a todo el país. Solo en Caracas, advierten las autoridades, se registran al menos dos al mes. Según la primera encuesta sobre Delito Organizado en Venezuela, que hizo la Asociación Civil Paz Activa, un tercio de la población considera que es fácil conseguir a un homicida por plata
La asesoría de riesgos especiales se ha consolidado en Venezuela. Sobre todo, por la gran cantidad de plagios que, desde 2005, se ha registrado en el país. Hasta el 24 de septiembre, el Cicpc había contado 122 casos con 142 víctimas. Eso no suma los números que por su parte maneja el Comando de Antiextorsión y Secuestro de la Guardia Nacional (CONAS), ni tampoco los de Fiscalía