Tejerías, ¿la culpa es de quién?

¿Qué busca Maduro echándole la culpa a la colonización española del desastre en Las Tejerías?… Porque es difícil tragarse la historia de que él, o su ministro Menéndez, no sabían que Tejerías, como comúnmente se conoce al poblado, fue fundada entre 1904 y 1905. Sus habitantes eran básicamente alfareros que fabricaban tejas, de donde probablemente deriva su nombre. Otros eran agricultores que cultivaban, principalmente, caña de azúcar, plátanos y cambures. Desde los años cincuenta comenzó a crecer como zona industrial, llegando a posicionarse como una de las cinco más importantes del país. De manera que si en Tejerías los habitantes construyeron ranchos en las montañas y cauces de las quebradas, el haberlo permitido ha sido responsabilidad de los gobiernos desde Cipriano Castro, hasta llegar al mismísimo Maduro.

Luego de la tragedia de El Limón y Ocumare en 1987, también en el estado Aragua, ha tenido que ser prioridad de los gobiernos no solo evaluar las zonas de posibles desastres naturales, sino también tomar las precauciones necesarias, como la reubicación de las viviendas construidas en zonas de riesgo. En Tejerías habían conocido ya la tragedia, cuando en 1993 estalló el gasoducto que iba paralelo a la Autopista Regional del Centro.

Pero volvamos al tema de Nicolás Maduro y qué puede haber detrás de esa búsqueda de pleito con el Reino de España, si hasta hace nada eran panas del alma del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de sus aliados Pablo Iglesias y Yolanda Díaz, y de los sempiternos José Luis Rodríguez Zapatero e Ignacio Ramonet, todos miembros, como sus alter ego venezolanos, de la izquierda de caviar.

Mucha gente piensa que Maduro es bruto. Yo pienso todo lo contrario. Sí creo que se hace el tonto cuando quiere desviar la atención de temas medulares y lo logra con facilidad. Porque alguien bruto hubiera sido incapaz de durar 9 años en el poder sin el carisma ni el dinero (principalmente el dinero) del que dispuso su antecesor Hugo Chávez, y encima con escenarios de hiperinflación, escasez, protestas, presos políticos, y con las democracias más sólidas del mundo en contra suya. Hay quienes juran que es un títere de los cubanos, y de ser así, pues lo ha hecho muy bien como títere… En escenarios caóticos siempre hay algo que lo salva en la raya.

Y ya que hablamos de los cubanos, el buscarse a un enemigo externo a quien echarle las culpas de todos los males, es un plan que, hasta el sol de hoy, les ha funcionado. En Cuba, todo lo malo que pasa, absolutamente todo, es culpa del bloqueo de Estados Unidos. Desde un huracán, hasta las recientes protestas. Chávez, en esa misma tónica, fue quien comenzó con la historia del supuesto genocidio indígena en un acto en el Teresa Carreño. Recuerdo cuando sus seguidores volaron a tumbar la estatua de Colón, como si Colón se hubiera instalado en Venezuela a matar nativos y como si los indígenas hubieran ofrecido resistencia. En aquella Tierra de Gracia todo era perfecto, según relata Colón en sus cartas a los Reyes Católicos: desde las bellezas naturales hasta la hospitalidad de sus habitantes. Pues bien, en ese revisionismo histórico, lo que era el Paseo Colón ahora se llama el Paseo de la Resistencia Indígena, como se le llama también al 12 de octubre, que en el resto del mundo se conoce y se celebra como la fecha del descubrimiento de América. De lo que sí podemos culpar a los españoles es de haber traído la sífilis, de la que murieron muchísimos indígenas, pero esa es parte de otra historia, la de las enfermedades y la Medicina.

La verdad verdadera es que nuestra mayor herencia, aunque no le guste a Maduro, a los Rodríguez, a Menéndez y a todos los demás, es la española. Así son las conquistas en todas partes del mundo y la Historia no se puede cambiar. De manera que este ataque, innecesario por demás, a la Madre Patria, debe tener otras razones y debe buscar otras consecuencias. ¿Cuentos chinos? También pueden ser rusos. O cubanos. Nuestros invasores y conquistadores del siglo XXI.