Los autos que Trump no podrá disfrutar
El nuevo presidente de Estados Unidos tendrá que dejar sus lujosos vehículos guardados y acostumbrarse a “La Bestia” por lo menos durante los próximos cuatro años
El nuevo presidente de Estados Unidos tendrá que dejar sus lujosos vehículos guardados y acostumbrarse a “La Bestia” por lo menos durante los próximos cuatro años
Como buen multimillonario, el Donald Trump disfruta de los buenos carros, una pasión que por los próximos cuatro años (esperemos) no podrá disfrutar pues como nuevo líder de los Estados Unidos no podrá hacer uso de otros autos que no sean los oficiales. Incluso su mujer Melania no podrá utilizar ningunos de los vehículos de la familia.
Aunque no llega al extremo de Cristiano Ronaldo o de algunos jeques árabes de coleccionar autos y salir cada día en uno distinto, la colección de Trump es digna de cualquier empresario con millones suficientes para adquirir el auto que mejor le plazca, que en este caso se inclina hacia los clásicos propios de los viejos ricos y ostentosos. Veamos
Rolls –Royce Phantom
Símbolo indiscutible de riqueza, quizás el modelo que mejor encaja con su personalidad. Tiene un motor BMW de 12 válvulas en V de 6,75 litros de cilindrada y 48 válvulas que entrega 460 caballos que le permiten acelerar de 0 a 100 Km/h en 5,7 segundos.
El propietario puede escoger entre 44.000 colores y configuraciones distintas y personalizarlo como mejor le guste. Incluso algunos han sido recubiertos con láminas de oro.
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Rolls-Royce Silver Could
Con un aire tan arcaico como su dueño, este clásico fue uno de los primeros carros que se compró el magnate al hacer sus primeros millones. El motor es de seis cilindros en línea de 4.9 litros y doble carburador que aporta 155 caballos.
La transmisión automática de cuatro velocidades. Pesa 2.108 kilos y por ello su velocidad se limita a 165,6 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 13,5 segundos, toda una proeza para un auto tan pesado como su propietario.
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Chevrolet Camaro Indianapolis 500 Pace Car
Utilizado como auto madrina en las 500 millas de Indeanápolis, en 2011 General Motors (empresa que ha sido duramente criticada por Trump) regaló al millonario el auto que abrió la más importante carrera disputada en Estados Unidos.
Está impulsado por un motor V8 de 6.2 litros que ofrece 426 caballos y acoplado a una transmisión automática de seis velocidades.
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Mercedes-Benz S600
Otro carro ostentoso. Se trata del resurgimiento de la marca Maybach que utiliza la plataforma de la Clase S para hacer de éste un modelo súper exclusivo.
Viene equipado con un propulsor V12 biturbo de 6.0 litros que entrega una potencia de 523 caballos y con todo el lujo interno que la marca tope de Mercedes-Benz es capaz de ofrecer. Es el auto favorito de Melania para salir de compras.
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Mercedes SRL McLaren
Otro Mercedes se une a la lista de autos, esta vez un deportivo pero con aire de refinamiento que la marca alemana puede ofrecer. En su interior esconde un V8 5.5 litros que entrega 650 caballos, fuerza suficiente para que pueda ir de 0 a 100 km/h en apenas 3,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 335 km/h.
Aunque en honor a la verdad, es muy difícil que este señor haya nunca comprobado la máxima aceleración.
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Bentley Continental GT
Más acorde con sus gustos es este hermoso y clásico coupé que aunque sin el lujo del Mulssane que tuvo el finado y comunista Hugo Chávez, es uno de los autos de serie más exclusivo del mundo.
Viene equipado con un propulsor V8 de 4.0 litros biturbo que entrega 507 caballos unido a una caja automática de ocho velocidades. Alcanza los 100 km/h en cinco segundos y tiene una velocidad máxima de 318 km/h.
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Lamborghini Diablo Roadster
No sabemos si aún lo conserva o si fue cedido a Marla Maples tras el divorcio. Lo cierto es que para complacer a su seguramente rápida mujer Donald adquirió un Lambo Diablo, uno de los modelos emblemáticos de la casa italiana.
La versión descapotable del magnate equipa un motor V12 de 6.0 litros y una potencia de 575 caballos que podía alcanzar los 340 Km/h sin ninguna dificultad.
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“La bestia” será su único auto
Mientras sea presidente de los Estados Unidos, Donald Trump no podrá usar ninguno Ni siquiera para dar una vueltica en el patio de la Casa Blanca. Tendrá que conformase con unas ‘La bestia’, como se llama a la limusina ultra blindada asignada al hombre más vigilado del mundo.
Fabricada desde hace más de 30 años por Cadillac, la división de lujo de General Motors, su nombre se debe a que es un verdadero búnker rodante: la usada por Barack Obama pesa 6,8 toneladas por el impresionante nivel de blindaje de acero, titanio, aluminio y cerámica de 7.7 pulgadas de espesor y vidrios de 5.1 pulgadas.
A prueba de granadas y bombas, está herméticamente sellado para prevenir ataques químicos. Tiene además un arsenal de armas automáticas y cañones de gas; aditamentos éstos que también incluidos las varias réplicas y los 15 vehículos que componen el séquito presidencial.
Para tener una idea del nivel de equipamiento, cuenta con bolsas de sangre compatible para realizar in situ una transfusión en caso de emergencia, así como una unidad portátil de terapia intensiva, además de todas las comodidades para que el presidente pueda seguir despachando como si de la Oficina Oval se tratara.
Para mover esta mole, Cadillac equipa su limusina con un potente motor de 6.5 litros que, dado el peso, apenas alcanzar una velocidad cercana a los 100 km/h, mientras que la aceleración de 0 a 100 km/h es de 15 segundos.
Con un costo cercano a los 1,5 millones de dólares, se desconoce si Trump utilizará la misma unidad que Obama. En caso de querer un nuevo vehículo, no se sabe si General Motors seguirá fabricando el auto más seguro del mundo o si Lincoln, la división de lujo de Ford, retomará la tarea que le fue quitada durante la presidencia de Ronald Reagan.
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Jesús Hurtado (@jahurtado15)